
El poder de la educomunicación transforma la enseñanza en la UCSG
Docentes y estudiantes de la UCSG crean contenidos que unen comunicación, pedagogía e inclusión educativa
En la Universidad Católica de Santiago de Guayaquil (UCSG), la educación está experimentando una transformación que no depende solo de la tecnología, sino del poder de la educomunicación: la capacidad de enseñar comunicando y de comunicar enseñando. A través de la Unidad de Tecnologías del Aprendizaje (UTA), creada en abril de 2024 bajo el Vicerrectorado Académico, la universidad ha encontrado una nueva forma de unir pedagogía, creatividad y comunicación para renovar la enseñanza universitaria.
El proyecto nació con la convicción de que el aprendizaje significativo requiere algo más que contenidos digitales. Requiere narrativas, emociones y formatos que conecten con las nuevas generaciones. La UTA fue concebida precisamente para eso: para crear materiales audiovisuales que no solo informen, sino que generen comprensión, reflexión y diálogo. “El Vicerrectorado Académico da soporte a las carreras de la UCSG mediante la producción de piezas audiovisuales que acompañan el proceso de enseñanza-aprendizaje. Pero también las compartimos con la comunidad, aportando contenido de valor desde la academia”, explica Denisse Gonzaga Landín, coordinadora de la unidad y máster en Comunicación Organizacional.
Una herramienta inclusiva en la universidad
La educomunicación se convierte así en una herramienta estratégica dentro del aula universitaria. A través de videos, cápsulas, podcasts, audiolibros y cursos en línea, la UCSG logra que el conocimiento sea más accesible y atractivo para los estudiantes. En la UTA, cada producto sigue una estructura basada en la metodología 4E (Enganche, Explicación, Exploración y Evaluación), un modelo que ordena los contenidos y asegura que el proceso educativo sea coherente, claro y participativo. “No se trata de hacer videos por hacerlos. La metodología 4E permite que cada pieza tenga un hilo conductor: primero se capta la atención, luego se explica, se invita a la práctica y finalmente se evalúa el aprendizaje”, detalla Gonzaga.
El impacto de esta estrategia va más allá de lo tecnológico. La educomunicación, entendida como un puente entre el conocimiento y la experiencia humana, se ha convertido en una vía para incluir a estudiantes con diferentes formas de aprender. Los productos audiovisuales permiten que personas con discapacidad auditiva o visual, o simplemente con estilos de aprendizaje distintos, puedan acceder al contenido educativo.
“Hay alumnos que pueden tener dificultades para leer textos extensos, pero sí pueden comprender mejor un video o un podcast”, añade la coordinadora. En este sentido, la innovación de la UCSG no solo se mide en recursos digitales, sino en su apuesta por la accesibilidad y la empatía dentro del proceso educativo.
Proyectos que salen fuera del país
Entre los proyectos más representativos destaca el podcast La VAnka de atrás, un espacio donde docentes, graduados y profesionales conversan sobre temas de ciencia, arte y cultura con un tono cercano y reflexivo. Su alcance ha traspasado fronteras: algunos episodios se transmiten por el canal universitario de la Universidad de Guadalajara, en México, donde se reconoce la iniciativa como una muestra del valor académico de la UCSG. Este intercambio reafirma la idea de que la educomunicación puede conectar universidades y sociedades a través de un lenguaje común: el de las ideas.

Los protagonistas de los recursos audiovisuales
La participación de los estudiantes es otro elemento clave dentro de la propuesta. Jóvenes de carreras como Comunicación, Diseño y Producción trabajan junto al equipo de la UTA en la creación de materiales que combinan estética y pedagogía. Francisco Franco, diseñador gráfico, considera que la educomunicación ha cambiado su forma de entender el diseño. “Buscamos que el aprendizaje no se sienta como una obligación. El diseño gráfico ayuda a que los contenidos sean comprensibles y cercanos”, comenta.
Por su parte, el productor Ricardo Molestina asegura que los reels educativos se han convertido en el formato más efectivo para captar la atención de los jóvenes: “Son piezas breves y dinámicas que logran conectar con los estudiantes y motivar a los docentes a crear su propio contenido”.
La educomunicación no solo redefine cómo se enseña, sino también cómo se comunica el conocimiento dentro de la comunidad universitaria. Por eso, la UTA también ofrece capacitaciones a docentes en temas de voz, dicción y lenguaje corporal, con el fin de fortalecer las competencias comunicativas del profesorado. En palabras de Gonzaga, la educación actual exige docentes que dominen el contenido, pero también sepan transmitirlo con claridad y sensibilidad. “La comunicación es transversal. No se puede enseñar sin comunicar con propósito”, enfatiza.