
Jorge Guzmán y Emelec: La audiencia que podría dejar a los azules sin directiva
Este miércoles 31 de diciembre, el Viceministerio del Deporte tomará una decisión ante las denuncias de Carlos Puga
La directiva del Club Sport Emelec, encabezada por el presidente Jorge Guzmán Mancilla, comparecerá este miércoles 31 de diciembre, a las 10:00, en una audiencia telemática convocada por el Viceministerio del Deporte, que lidera Roberto Ibáñez.
El procedimiento administrativo busca revisar la validez de la inscripción del directorio registrado el 5 de abril de 2025, tras una solicitud presentada por el socio Carlos Javier Puga Barros, ex miembro de la dirigencia de José Pileggi y Cesar Avilés, quien alega posibles inconsistencias en el proceso.
Te puede interesar: Futbolistas ecuatorianos en el exterior: un 2026 clave en Europa y Sudamérica
La audiencia, que ha sido postergada en dos ocasiones previas durante diciembre, se llevará a cabo de manera virtual. De confirmarse irregularidades en el registro, el caso podría derivar en la notificación a la Federación Ecuatoriana de Fútbol (FEF) para la designación de un interventor temporal, lo que implicaría una acefalía institucional en el club 'Millonario'.
Jorge Guzmán y el camino "cuesta arriba" en Emelec
La gestión de Jorge Guzmán al frente del conjunto eléctrico, que inició en febrero de 2025 tras ganar las elecciones ante Jose Auad, ha estado caracterizada por significativos desafíos administrativos heredados y nuevos. Al asumir el cargo, la directiva se encontró con un déficit superior a los 15 millones de dólares, deudas pendientes con jugadores y personal administrativo, así como múltiples sanciones de la FIFA que impedían la inscripción de nuevos futbolistas.
Estas inhibiciones, que llegaron a sumar hasta más de 9 en diciembre de 2025, derivando de obligaciones económicas no cumplidas con exintegrantes de la plantilla, complicando la planificación deportiva y contribuyendo a una temporada 'crítica', sin ingresos adicionales por la no clasificación a torneos internacionales.
Durante el año, la institución enfrentó paralizaciones del plantel por atrasos salariales que alcanzaron varios meses, huelgas de jugadores y promesas de pago parcialmente incumplidas, lo que generó tensiones internas y afectó el rendimiento en la LigaPro, dejando al equipo de Guillermo Duró en el 10mo puesto del Hexagonal de Copa Sudamericana, solo por delante de El Nacional y Delfín.