
Futuro del estatuto de Barcelona SC: cambios clave para fiscalización y transparencia
Karla Escobar, de la comisión normativa, dijo que la directiva trabaja en su propia reforma, que incluye límites a la deuda
Los abogados y exdirectivos de Barcelona SC, Gerson Haro y Franklin Verduga, buscan reactivar una propuesta de reforma estatutaria con el objetivo de proteger al club y limitar el poder de los presidentes de turno en el manejo de los recursos del club.
(Te invito a leer: Joao Rojas revela su verdad en El Regreso: cáncer, dolor y la pérdida de su bebé)
Sin embargo, la presidenta de la comisión de normativa de la institución, la abogada Karla Escobar, descartó que ese borrador sea tomado en cuenta, ya que, asegura, la actual directiva trabaja en una propuesta “ajustada a las verdaderas necesidades del equipo”.
Exdirectivos reclaman falta de control sobre recursos en Barcelona SC
Haro y Verduga aseguran que la falta de información a los socios sobre la gestión de la directiva de Antonio Álvarez, junto al mal momento deportivo del Ídolo en su año centenario y un déficit de 54,1 millones de dólares, los ha motivado a actuar.

Lo que alarma a los exdirigentes es que, pese a este panorama, la estructura interna del club sigue permitiendo que el presidente tenga control sobre los recursos sin ser fiscalizado.
Una reforma postergada
Frente a este escenario, Haro y Verduga insisten en una reforma estatutaria que presentaron en 2023, cuando formaban parte de la comisión de normativa durante la gestión de Carlos Alfaro Moreno (2019-2023).
“Lo que queremos es que ningún presidente tenga la potestad de usar el dinero del club sin control”, afirma Haro.
Según él, el estatuto vigente desde 2014 está desfasado y permite conflictos de interés, ya que posibilita que directivos y sus allegados mantengan relaciones comerciales con el club. “Eso debe prohibirse”.
La reforma propone cerrar esta brecha, vetando cualquier vínculo comercial entre la institución y personas relacionadas con los dirigentes de turno.
Nuevos órganos de control
La propuesta incluye la creación de órganos de control independientes: una comisión de fiscalización, un oficial de cumplimiento y una auditoría interna que opere de forma continua.
“Solo se realizan auditorías externas al finalizar cada administración, pero no existe un sistema de control permanente ni una estructura formal que supervise al directorio”, advierte Haro.
Además, plantea que la comisión de fiscalización pueda solicitar información y revisar contratos sin necesidad de autorización presidencial. “No estarán por encima del directorio, pero contarán con autonomía para fiscalizar”, aclara.
El poder sin contrapesos
Verduga, expresidente de la comisión de normativa en la era Alfaro Moreno, señala como principal problema el artículo 50 del estatuto, porque otorga al presidente poderes amplios para contratar personal, firmar convenios y comprometer recursos sin aprobación del directorio.

“Recuerdo que Alfaro decía: ‘Yo soy el que firma, me ampara el estatuto’. Y tenía razón. Esa excepción es el origen de muchos problemas económicos”, sostiene Verduga.
Por ello, proponen que el presidente deba presentar una caución patrimonial y responda con su dinero si excede el presupuesto anual.
Comisiones sin vínculos
Otro de los cambios apunta a que las comisiones sean integradas por socios independientes, sin vínculos con la directiva de turno. “El presidente designa a los miembros, así no hay transparencia”, critica Haro.
Por su parte, Verduga es tajante: “El estatuto es la Biblia del club. Si no lo actualizamos, seguirán hundiendo al equipo”.
José Jorgge Bejarano, socio desde hace 20 años, coincide: “Si no se establecen controles, seguirán endeudando al club”.
“Cuando pudieron, no hicieron nada”
Desde la comisión de normativa, Karla Escobar respondió: “Ahora quieren actualizar el estatuto, pero cuando fueron parte de esta comisión no hicieron nada. Según los registros, ni siquiera sesionaron en los últimos dos años”.
Escobar aseguró que el documento que Haro y Verduga entregaron fue presentado horas antes de su renuncia, en junio de 2023, para sumarse a la candidatura de Rafael Verduga. “Nunca lo presentaron en asamblea porque no terminaron de elaborarlo y se acabó el periodo de Alfaro Moreno”.

La abogada afirmó que la actual directiva ya trabaja en una reforma “realista y ajustada a las necesidades del club” y adelantó que el nuevo estatuto incluirá restricciones para impedir que los directivos cobren sueldos o firmen contratos que los beneficien.
“Antes había contratos que incluían hasta 500 perfumes para los dirigentes. Como parte de la comisión normativa, revisé el proyecto de estatuto que hicieron y lo presenté al directorio, pero me opuse a muchos temas, entre ellos a que los directores cobraran sueldos”, afirmó la jurista.
Escobar también recordó que existe una comisión de transparencia y que ella misma impulsó la creación de la comisión de fiscalización, desde la cual presentó una denuncia penal contra Francisco Cevallos por presuntas irregularidades en un informe forense.
“Los allegados, amigos o familias de los actuales directivos no tienen negocios con Barcelona; más bien, en las directivas anteriores pasó eso y no dijeron nada. En cambio, el presidente Antonio Álvarez ha prestado plata sin intereses al club”, dijo.
El nuevo estatuto
Sobre la propuesta que impulsa la actual directiva, Escobar adelantó medidas concretas: ninguna administración podrá endeudarse más del 5% del presupuesto en un periodo de cuatro años, y el 50% del ingreso por ventas de jugadores deberá destinarse obligatoriamente a pagar el pasivo.
“Queremos blindar y proteger al club de manejos irresponsables. Y ese 5% de endeudamiento solo podrá destinarse a inversiones, no a gastos corrientes”, explicó.
Finalmente, indicó que el nuevo estatuto será entregado y socializado con los socios antes de que finalice el actual periodo presidencial, en 2027.
Además, antes de diciembre de este año deberá adaptarse a las directrices de FIFA en temas como la lucha contra el racismo. “Si no lo hacemos, no tendremos el aval para competir en 2026”, advirtió.
Para seguir leyendo EXPRESO sin restricciones, ¡SUSCRÍBETE AQUÍ!