
Fito en el contexto internacional: Comparación con líderes criminales extraditados
José Adolfo Macías Villamar es el primer narcotraficante ecuatoriano extraditado directamente desde el país
La reciente aceptación de extradición de José Adolfo Macías Villamar, alias Fito, líder de la organización criminal Los Choneros, ha sacudido el panorama judicial y político de Ecuador. Su traslado a Estados Unidos, donde enfrenta siete cargos por narcotráfico, tráfico de armas y crimen organizado, lo convierte en el primer narcotraficante ecuatoriano extraditado directamente desde el país tras la reforma constitucional de 2024.
(Lee también: Inmuebles incautados: ¿Qué pasa con los bienes de criminales en Ecuador?)
La decisión de Fito de someterse voluntariamente al proceso judicial estadounidense fue tomada en una audiencia virtual desde la cárcel de máxima seguridad La Roca, en Guayaquil. “Sí acepto, su señoría”, declaró ante el juez, en una frase que selló su destino y aceleró un proceso que, en otros casos, ha tomado años.
Un perfil comparable al de capos internacionales
La Corte del Distrito Este de Nueva York, la misma que procesó a Joaquín El Chapo Guzmán, formalizó los cargos contra Fito en abril. Las autoridades lo describen como un “líder despiadado” de una organización transnacional con capacidad logística casi militar, capaz de movilizar toneladas de cocaína y armas a través del continente.
Esta caracterización lo coloca en una categoría similar a la de otros capos latinoamericanos extraditados a EE. UU., como:
- Washington Prado Álava, alias Gerald, conocido como el 'Pablo Escobar ecuatoriano', extraditado desde Colombia en 2018 tras ser acusado de enviar más de 250 toneladas de droga a EE. UU.
- Dairo Antonio Úsuga, alias Otoniel, líder del Clan del Golfo en Colombia, extraditado en 2022 por delitos de narcotráfico y vínculos con grupos paramilitares.
- Los hermanos Rodríguez Orejuela, fundadores del cartel de Cali, extraditados una década después de su captura en 1995.
A diferencia de estos casos, Fito será el primer ecuatoriano extraditado desde territorio nacional, gracias a la reforma constitucional aprobada por más del 64% de los votantes en una consulta popular impulsada por el presidente Daniel Noboa.

Implicaciones para Ecuador y la región
La extradición de Fito representa un hito en la lucha contra el crimen organizado en Ecuador. Su figura, que llegó a tener influencia dentro y fuera de las cárceles, incluso grabando videos musicales y organizando ruedas de prensa desde prisión, simboliza el poder que las bandas criminales han acumulado en el país.
(Te invitamos a leer: Descubren nuevo búnker de 'Fito' con lujos inesperados durante operativos policiales)
Expertos consideran que este caso podría sentar un precedente para futuras extradiciones de líderes de bandas como Los Lobos o Los Tiguerones, que han replicado el modelo de Los Choneros en el control de cárceles y rutas del narcotráfico.
Mientras tanto, en Estados Unidos, Fito enfrentará un juicio que podría derivar en una condena de hasta cadena perpetua. Su decisión de abandonar Ecuador, donde ya se había fugado dos veces del sistema penitenciario, refleja no solo una estrategia legal, sino también una búsqueda de supervivencia: quedarse podría haber significado una muerte segura, como ocurrió con su predecesor, alias Rasquiña.
¿Quieres leer contenido de calidad sin restricciones? ¡SUSCRÍBETE AQUÍ!