
Diana Salazar y su gestión en Fiscalía: entre la justicia y el espectáculo mediático
Una exfiscal general, un expresidente de la Judicatura y abogados en libre ejercicio evalúan el trabajo de Diana Salazar
Diana Salazar Méndez puso el 20 de mayo de 2025 punto final a seis años de gestión marcados por logros, polémicas y críticas como fiscal general del Estado.
A través de un video, Salazar se despidió del cargo con un mensaje de desprendimiento, afirmando haber cumplido con su tarea y expresando su confianza en que el fiscal subrogante, Wilson Toainga, continuará con el trabajo.
Sin embargo, según juristas consultados por EXPRESO, Salazar deja claroscuros en su gestión al frente de la Fiscalía General del Estado que merecen ser destacados.
Diana Salazar: una fiscal general valiente que se enfrentó a las mafias
La ex fiscal general Mariana Yépez, por ejemplo, resalta el trabajo realizado por Salazar y sostiene que ha tenido más trascendencia e impacto para el país de lo que se pueda pensar.
“Gracias a las investigaciones que ha realizado la Fiscalía, se han podido descubrir las tramas de corrupción dentro del sector judicial y público del país, especialmente las relacionadas con el narcotráfico y el crimen organizado”, argumenta.
En esa misma línea, Marcelo Merlo, excontralor y expresidente del Consejo de la Judicatura transitorio, sostiene que Diana Salazar se ha convertido en una figura destacada.
“Es reconocida a nivel mundial como una mujer valiente, decidida, transparente y que ha arriesgado su vida en medio de una mafia que lamentablemente rodea una gran parte del sector público”, analiza.

Los excesos innecesarios de Diana Salazar como fiscal general
No obstante, sin desmerecer los logros de Salazar, quien logró sacar a la Fiscalía General del Estado de la desinstitucionalización en la que cayó durante gestiones como la de Galo Chiriboga, el jurista Pablo Encalada considera que hubo excesos en su gestión.
“En algunos momentos actuó de manera arbitraria y abusiva. Por ejemplo, cuando allanó las oficinas de unas juezas porque no le gustó su decisión, e incluso de forma innecesaria, cuando lo hizo en Carondelet”.
Encalada también considera que, a pesar de su gestión de seis años, Salazar no supo llevar a la Fiscalía hacia una modernización adecuada para enfrentar los nuevos desafíos del país.
Diana Salazar y el 'show' mediático de la justicia
Aunque reconoce su trabajo, el jurista Julio César Cueva considera que los reparos no terminan ahí. De hecho, dice que la gestión de Salazar estuvo marcada por lo mediático y lo espectacular en los casos.
“Se inclinó mucho por una justicia sustentada en lo mediático y no tanto en lo procesal o probatorio. Muchos procesos avanzaron hasta ciertas etapas, incluso condenatorias, basados en este remolino mediático”, comenta.
Cueva añade que es evidente que muchos casos nacieron de coyunturas políticas y que la Fiscalía los trataba de manera diferenciada, lo que generaba una sombra de selectividad y relegaba otros procesos.

Diana Salazar 'golpeó a todos' y eso le sumó enemigos
Sin embargo, Encalada advierte que cuando hay investigaciones contra políticos, también existen implicaciones políticas, lo cual no necesariamente implica que la fiscal saliente haya tenido un sesgo.
“Hay que recordar que Salazar fue directora de la UAFE y fue designada fiscal general durante el gobierno de Lenín Moreno, quien está siendo procesado por un caso iniciado en su periodo. Lo mismo ocurre con el cuñado del expresidente Guillermo Lasso”, señala.
Además, recuerda que la propia Constitución faculta al fiscal general a actuar bajo el principio de oportunidad, lo que implica una selección natural de casos a los que se les debe dar prioridad según su relevancia nacional.
Por su parte, Cueva admite que los claroscuros de Diana Salazar al frente de la Fiscalía General del Estado tienen un factor común: la constante persecución política que, en varias ocasiones, intentó sacarla del cargo de forma anticipada.
¿Quieres acceder a todo el contenido de calidad sin límites? ¡SUSCRÍBETE AQUÍ!