Cultura

DAVID HARUTYUNYAN 03
Harutyunyan dirigió la Orquesta Sinfónica de Guayaquil durante catorce años y fundó la Orquesta Filarmónica de Guayaquil, de la cual fue director titular hasta 2023.OSNE

David Harutyunyan se reinventa en Quito tomando la batuta de la Sinfónica Nacional

El reconocido músico detalla su llegada a la capital, los desafíos y su plan para el ensamble

El maestro David Harutyunyan asumió recientemente el cargo de director musical de la Orquesta Sinfónica Nacional del Ecuador, un nombramiento que marca una nueva etapa en su trayectoria. “Me llamaron y me propusieron ocupar el puesto de director titular. Antes hubo una conversación muy importante en mi casa, con Pamela (su esposa)”, relata entre risas. “Después de que me dio formalmente el permiso para ausentarme de Guayaquil, acepté”.

Dirigir orquestas es, sin embargo, un reto que David ya puede asumir con los ojos casi cerrados. Antes de llegar a Ecuador, estuvo al frente de la Gran Orquesta Sinfónica del Conservatorio Nacional de Armenia y de la Orquesta del Teatro Nacional de Ópera y Ballet de Armenia, además de participar en la dirección de la Orquesta de Música Contemporánea Nova Música.

Ed Sheeran promociona su álbum Play

Ed Sheeran en Ecuador: fechas, lugar y venta de entradas de su gira mundial

Leer más

En el país, dirigió la Orquesta Sinfónica de Guayaquil durante catorce años y fundó la Orquesta Filarmónica de Guayaquil, de la cual fue director titular hasta 2023.

Por eso, describe su llegada a la Sinfónica Nacional como “volver a casa” y asegura haberse sentido acogido desde el primer momento: “La palabra ‘cómodo’ es poco. Me siento muy natural con la orquesta. Estoy disfrutando cada ensayo y el ambiente, que es único, de total colaboración. Estamos creando juntos arte, no estamos solo cumpliendo con lo que tenemos que hacer”.

Vivir entre dos ciudades

En lo personal, Harutyunyan reconoce que su vida entre ciudades exige un equilibrio constante entre los compromisos profesionales y la familia. “Quito me recibió con besos y abrazos, y con un público ya consolidado para la Sinfónica Nacional”, comenta con una sonrisa.

Añade que la decisión de viajar entre la capital y Guayaquil trajo consigo un curioso cambio de papeles en su hogar: “Antes era Pamela quien viajaba constantemente a Quito por su trabajo, y ahora me toca a mí moverme entre ciudades. Vivir así es difícil, pero extrañar a la familia tiene su encanto: los encuentros son deliciosos, aunque las despedidas sean tristes. Cada reencuentro se convierte en un momento único, que da sentido a todo el esfuerzo y la distancia”, cuenta.

DAVID HARUTYUNYAN 04
El jueves 23, y el viernes 24 y sábado 25 de octubre, David dirigirá la cantata Carmina Burana en la Casa de la Música.GUSTAVO GUAMAN

Enfrentar los retos

Sobre los desafíos de dirigir la Sinfónica Nacional, Harutyunyan asegura que uno de los principales retos es cumplir con las expectativas.

Sabrina Carpenter, cantante, compositora, productora musical y actriz estadounidense.

Sabrina Carpenter en SNL: bromea sobre la portada polémica y defiende su creatividad

Leer más

“Al frente de la orquesta hay muchos músicos con alta preparación que siempre te miran críticamente. También está el público, los periodistas y quienes supervisan las orquestas del Estado. Por último, está tu propia conciencia y tu ojo crítico, que debes mantener siempre activo para crecer. Si no encuentras esa ‘quinta pata al gato’, estás perdido”, afirma.

A ello se suma, dice, la necesidad de equilibrar un repertorio que combine la música académica con la popular y las piezas favoritas del público. “Siempre trato de variar el repertorio para no aburrirme a mí mismo ni al público, y para poder compararme con mi trabajo anterior y ver cómo he cambiado a lo largo del tiempo”, explica el director.

El jueves 23, y el viernes 24 y sábado 25 de octubre, David dirigirá la cantata Carmina Burana en la Casa de la Música. “El público ecuatoriano ama Carmina Burana. Tiene una conexión muy especial con la gente, y me agrada poder montarla nuevamente, porque entiendo el cariño que le tienen”, comenta.

Rockero de corazón

Confiesa que, aunque tiene cientos de favoritos entre la música académica y popular, en el fondo es un rockero de corazón. “Soy gravemente rockero. Cuando descanso, pongo heavy metal o hard rock a todo volumen para desconectarme del mundo”, confiesa risueño.

Añade que, para él, lo importante es la emoción que transmite una obra, ya sea una sinfonía de Mahler o un solo de guitarra de Slash. “La buena música te sacude, te mueve algo por dentro. No importa si es Beethoven o Queen. Esa es la magia que busco, como oyente y como director”, reflexiona.

Entre sus proyectos futuros, Harutyunyan quiere consolidar su ‘marca personal’ en la orquesta con un encuentro con los iconos interncionales: “Quiero que la Orquesta Sinfónica Nacional tenga acceso a artistas internacionales de muy alto rango que se presentan en los mejores escenarios del mundo, para que ellos vengan y toquen con nosotros. Es mi marca personal. El público aquí tendrá la oportunidad de conocer artistas importantes sin salir de su ciudad”, cuenta.

Para seguir leyendo más contenido de EXPRESO, suscríbete aquí