hacheros 1
Temor. En calles del centro de la ciudad, como en otros sectores, la escena de la gráfica se vuelve cotidiana.Christian Vinueza

Seis sectores de la ciudad, en vilo por el consumo de drogas

Una investigación médica revela un incremento de adictos a la conocida ‘H’ en el Puerto Principal. En la Bahía y calles del centro se visibiliza más el problema

‘La muerte se escribe con H’. No se trata de la octava letra del abecedario ni el título de una novela con tintes de crónica roja. La inscripción resalta una realidad que carcome por dentro a menores de edad (12 a 18 años), puntualmente en ocho sectores de la provincia del Guayas que han sido identificados con mayor incremento del consumo de drogas, especialmente de esa mezcla de heroína con otras sustancias nocivas para el ser humano. Seis de esos sitios están en la ciudad de Guayaquil.

La investigación fue realizada por el doctor Rómulo Bermeo Zañudo, miembro de la Comisión de Proyectos Comunitarios y de Prevención del Consumo de Drogas del Colegio de Médicos del Guayas (CMG), como parte de un estudio solicitado por la Vicepresidencia de la República, en el marco de un análisis situacional de la salud en el Ecuador.

consumo dedrogas

Guayaquil: Un consumo que no caerá con la eliminación de una tabla

Leer más

Según los resultados, los sitios donde se detectó ese incremento del consumo de la ‘H’ en el Puerto Principal fueron:el Suburbio, Cisne II (21 y la F), Guasmo (Proletarios sin Tierra), Trinitaria (segundo puente), el Fortín y la Bahía (sector 4 Manzanas, Huancavilca). Otros sectores están en los cantones de Durán y Salitre.

“Se habló con pacientes que consumen, con moradores, líderes comunitarios sobre la problemática de drogas en esos sectores, previo conocimiento de los sitios donde hay mayor incidencia del consumo y expendio”, especialmente de la Zona 8 (comprende Guayaquil, Durán y Samborondón), detalló Bermeo.

MEDICO Y CONSUMIDORES 3

El médico que lleva el pan de cada día a las calles para reducir el consumo de drogas

Leer más

De 300 pacientes con adicciones, atendidos durante la investigación que se desplegó en el primer semestre de 2021, pero fue publicado a finales de ese año, un 60 % había consumido ‘H’. Otro porcentaje que llamó la atención fue el 48 % que provenía de familias medianamente disfuncionales, mientras que un 34 % de familias severamente disfuncionales.

Frente a esa situación, EXPRESO consultó al Ministerio de Salud Pública (MSP) cuáles son los planes y acciones que se han ejecutado o están en desarrollo para mitigar esa problemática social que, en la actualidad, no solo la vemos en los barrios, sino en zonas céntricas y turísticas de la ciudad. Hasta el cierre de esta edición, no hubo respuesta.

hacheros 2
Los chamberos son los más vulnerables al consumo de la H.Christian Vinueza

En cuestión de seguridad, entre el 1 de enero hasta el 7 de febrero de 2022, la Policía Nacional ha detenido a 325 personas por el delito de tenencia de drogas, en 276 operativos desplegados en el Distrito Metropolitano de Guayaquil (DMG), en los que se incautaron 878.317,60 gramos de droga. En 2021, fueron detenidos 405 microtraficantes en posesión de más de 5,6 toneladas de alcaloides.

La situación, según el experto, se agravó tras la pandemia de la COVID-19. Como medidas sanitarias y de bioseguridad se dispuso el confinamiento y la mayoría de actividades se volcó a la virtualidad, como las clases. Eso provocó que el consumo de drogas de estudiantes, que antes era entre la casa y los alrededores de entidades educativas, migre a la esquina de sus hogares. “(...) esa gente que expendía droga por los colegios se volcó a la calle a buscar clientes, porque lamentablemente de eso viven, del expendio y consumo, lo que genera esa violencia que vivimos ahora”, examina Bermeo.

operativos

La intervención abarcará 257 puntos de consumo de drogas y muertes violentas

Leer más

Y lo fundamenta en esa atención que día a día despliega, en varios sectores de la ciudad como la Bahía y sus alrededores, donde se ha vuelto común observar a jóvenes tirados en aceras (muchos de ellos chamberos, los más expuestos al consumo de la ‘H’) o a ‘sonámbulos’ en las calles, en lugares turísticos o de concentración masiva.

Y es que el microtráfico se ha institucionalizado en los barrios, prácticamente en todos, como lo ha relatado este Diario, que a través de gráficas y testimonios ha contado que las familias han optado por vivir en una especie de burbuja ante el temor de que, por las drogas, puedan resultar lastimados.

“Es un tema cada día más impotente para la sociedad, tratar de que la droga disminuya para bien del ser humano, sobre todo para la niñez y la juventud. Lamentablemente, faltan muchos organismos y recursos como para llegar a los barrios y de ser posible gestionar y compartir con los comité barriales actividades, pero en su propio sector, para de una u otra forma alejar y distanciar de ese vicio que cada día está afectando más a la humanidad”, dice Javier Zurita, dirigente del barrio Garay.

Operativo preventivo d (6988485)

Guayaquil: 257 puntos de consumo de drogas serán intervenidos para reducir delitos

Leer más

En el Batallón del Suburbio, los vecinos ya cuentan cerca de ocho asesinados por drogas. Uno de los últimos hechos que recuerdan fue el ocurrido a un extranjero en las calles 44 y la Ñ, donde le pegaron cuatro tiros por vender sustancias en un sector que no era su territorio.

La situación no solo genera inseguridad en los habitantes de la zona, sino un temor constante por la presencia de los microtraficantes que se apoderan de más espacios, acompañado hasta de ‘ciertos controles’. “Pasa un carro le hacen señas que siga, le dan su material y salen. A una cuadra o dos hay personas armadas hasta con walkie-talkie (radio para comunicarse)”, describe un habitante del Suburbio, a quien se reserva su identidad por seguridad. En la calle 44, añade el morador, desde la C hasta la P, cada grupo tiene su clientela y expendio en sectores conocidos como el Infiernillo, Zona Piñata, Mall de la H, el Fondo (47 y la C) y Lomas del Tamarindo (49 y Rosendo Avilés). “Cuando alguien se pasa los límites vienen los problemas” y hasta la muerte.

Aumentó el consumo en los sectores urbano residenciales (...) esa gente que expendía droga por las entidades educativas se volcó a las calles a buscar clientes (...)

Rómulo Bermeo
médico investigador

Lamentablemente, hoy día faltan muchos organismos y recursos como para llegar a los barrios (con) actividades (...) para alejar y distanciar de ese vicio que cada día afecta más a la humanidad.

Xavier Zurita
dirigente del barrio Garay

EL DETALLE

Las edades de mayor consumo se mantienen. De 12 a 18 años sigue siendo el porcentaje más alto, que es justamente la etapa de colegio. De 10 a 12 el consumo es accidental o experimental, llega por conocidos o de grupos en colegios que presionan para involucrarlo en esa cadena. Algo que “taladra” en la cabeza de Mercedes Alcívar a pensar que deberá retomar la vigilancia de su hijo cuando regrese a clases presenciales.