El 31 de agosto de 2014 centenas de imágenes privadas de decenas de celebridades fueron publicadas en el mural de 4Chan. El material fue divulgado por otros usuarios a través de varias redes sociales como Reddit, Tumblr y Twitter.

Este evento fue bautizado por los usuarios de internet como Celebgate. Algunas de las artistas perjudicadas fueron Jennifer Lawrence, Rihanna, Kaley Cuoco, Kirsten Dunst, Vanessa Hudgens, Ariana Grande y Victoria Justice. Algunas de las cuales luego desmintieron la autenticidad de las fotografías, y otras la confirmaron.

Otras celebridades que se han visto en los mismos escándalos son Miley Cyrus, Anne Hathaway, Tiger Woods, Selena Gomez y Emma Watson.

Hoy, vemos un suceso similar con Emma Guerrero y José Ramón Barreto.

En los últimos años, la filtración de vídeos o imágenes íntimas de una persona o celebridad se ha vuelto un suceso cada vez más común, pero no menos impactante y difamatorio. Y, la mayor parte del tiempo, se debe al almacenamiento de información privada en nubes sin la protección apropiada.

¿QUE RIESGOS EXISTEN?

1. Nuestra información en manos de terceros:

Existe un dicho: “Cuando subes algo al internet, se queda ahí para siempre”, y hace referencia al hecho de que cuando subimos nuestra información a cualquier plataforma en línea, deja de estar bajo nuestra gestión. La seguridad de nuestra data pasa a ser gestionada por un proveedor que en la mayoría de los casos ofrece el servicio de forma “gratuita”.

Si algo podemos aprender de economía o política, es que nada es gratis. Pagamos un precio al entregar nuestra información para obtener un servicio en redes sociales o plataformas online, y es que nuestros datos son compartidos a terceros, como lo hacen Facebook y, descubierto recientemente, Tik Tok.

Esta información es utilizada para luego ofrecernos servicios o productos que vayan de acuerdo a nuestros intereses y hábitos, en la forma de Ads y de ese modo se da el negocio de los servicios “gratis” a través de pautas publicitarias.

2. Malware, códigos maliciosos:

Pueden llegar en forma de virus, troyanos, spyware a través de correos electrónicos, en sitios web desprotegidos, o través de dispositivos de almacenamiento externo y siguen siendo una de las mayores amenazas contra la privacidad de nuestra información.

Los hackers y cibercriminales cuentan con herramientas de malware que van desde monitorear nuestra actividad hasta robar nuestra data (fotos, contraseñas, números de tarjeta de crédito).

Nuestro nivel de exposición a esto depende de las actividades que realicemos en nuestros dispositivos electrónicos.

3. Phishing:

Es una técnica para obtener información confidencial personal o bancaria del usuario de forma fraudulenta, haciéndose pasar por una entidad (banco, fundación, etc.).

El estafador, o phisher,  se hace pasar por una persona o empresa de confianza en una comunicación aparentemente oficial de forma electrónica (correo, mensajería instantánea, SMS y hasta geolocalización) a raíz de un malware y puede robar datos personales, financieros y credenciales de acceso a redes o nubes de almacenamiento.

Se cree que los hackers involucrados en Celebgate lograron obtener las contraseñas de iCloud (nube de Apple) a través de esta técnica.

¿ES IMPOSIBLE PROTEGER MI PRIVACIDAD?

No es imposible, pero no se debe bajar la guardia en línea, sino lo harías en una interacción similar en la “vida real”. Te presentamos con 5 consejos para proteger tu información en redes sociales:

1. Utiliza contraseñas de alto nivel de seguridad:

Muchas veces utilizamos contraseñas sencillas que además utilizamos en varias aplicaciones. Lo mejor es utilizar contraseñas distintas para cada red social e incluir mayúsculas, minúsculas, números y caracteres especiales. Para mayor seguridad puedes activar la verificación de dos pasos, como ofrece Gmail, en la que te envían un código a tu celular antes de iniciar sesión en un dispositivo nuevo.

2. Limita la información personal que proporcionas:

No es necesario que completes todos los datos en tus perfiles, la mayoría de campos acerca de intereses, estudios, o familia son opcionales. De la misma manera, intenta no facilitar tu dirección, o compartir fotos que puedan afectar tu reputación.

3. Modifica las opciones de seguridad y privacidad:

Todas las redes vienen con la opción para configurar diferentes opciones de seguridad y privacidad. Elige quien puede ver tus publicaciones, la información que deseas mostrar en tu perfil, activar o desactivar la geolocalización, entre otras.

4. Ten precaución con las plataformas que solicitan acceso a tus datos:

Muchas aplicaciones o plataformas de servicio piden acceder a perfiles de redes sociales ("Conéctate con Facebook/Instagram/Correo Electrónico"). Es necesario tener precaución con el tipo de aplicaciones a las que les permites acceso a tus perfiles, porque podrían hacer uso fraudulento de datos privados.

5.Términos y Condiciones:

Nadie los lee, pero es importante verificar cuales son las condiciones de privacidad que nos garantizan las redes sociales y los servicios que utilizamos. Tener conocimiento de como manejan nuestros datos puede ser la clave para no ver nuestra imagen comprometida en la red.