
En Guayaquil, asesinan a niñas, de 4 y 7 años, mientras dormían
Madre había salido a dejar a otra de sus hijas a la escuela Se usó picahielo en crimen. Ocurrió en el noroeste de Guayaquil
La trágica y dolorosa escena con la que una madre se encontró la mañana de ayer viernes, no solo la dejó aterrorizada a ella, sino también a todo el sector donde habita. Sus hijas, de 4 y 7 años, habían sido degolladas sobre la misma cama en la que ella las había dejado dormidas minutos antes.
La progenitora había salido de casa para llevar a la escuela a la hermana mayor de las víctimas, quien tendría unos 9 años, y a su bebé, de meses, la dejó en la casa de una vecina. “No se demoró mucho. Fue y vino. Nos sorprendimos cuando salió corriendo y gritando: ¡mataron a mis hijas! ¡auxilio!”, recordó un vecino.
La misma madre también se habría comunicado con el 911 para informar del crimen cometido en contra de sus niñas. La señora estaba devastada. No paraba de gritar y llorar mientras algunos allegados buscaban la forma de consolarla dentro de su casa, ubicada en la división de las cooperativas Balerio Estacio y Janeth Toral, en el noroeste de Guayaquil.
Algo que llamaba la atención es que en el sector los perros siempre ladran cuando notan la presencia de una persona desconocida, pero esta vez eso no sucedió. “Se quedaron callados. A esa hora, más o menos a las 07:00, todos hubiéramos escuchado o incluso notado algo, pero no fue así. ¿Será que algún conocido las mató? Ojalá se investigue bien”, comentó un residente.
Una amiga de la familia afectada detalló que el crimen se habría cometido con un picahielo y que, al parecer, los pantalones de las pequeñas no estaban a la altura correcta. Sin embargo, estos detalles de la escena no fueron proporcionados por los investigadores.
El jefe zonal de Criminalística, coronel Carlos Perugachi, explicó que en el sitio se recogerían, entre otros, indicios biológicos que serán sometidos a diferentes pruebas, entre estas una de tipo genético, para determinar la identidad de uno o varios involucrados.
Además, precisó que en el Laboratorio de Ciencias Forenses se comprobará la causa de las muertes, porque aún no se había verificado si los cortes en el cuello fueron realizados antes o después del deceso de las menores.
Henry Herrera, jefe zonal de la Dirección Nacional de Delitos Contra la Vida (Dinased), al ser consultado acerca de si las víctimas tenían rastros de agresión sexual, manifesató: “Eso iremos a confirmar una vez que estemos en el laboratorio. En este momento estamos realizando los protocolos necesarios”.
La noticia le llegó al trabajo
El padre de las niñas se enteró del suceso luego de recibir la llamada de la madre. Sus vecinos contaron que él trabaja en una empresa en el turno nocturno, y que se encontraba cumpliendo sus labores cuando ocurrió el doble crimen. Una vecina lamentó la muerte de las niñas. Rememoró que eran tranquilas y que tenían muy buena relación con los vecinos.