El brócoli, entre la lista de productos que deben esperar a una negociación con EE.UU.
El brócoli, entre la lista de productos que deben esperar a una negociación.Archivo / Expreso

El 65 % de la oferta ecuatoriana exportable que va a EE.UU., en ‘banquillo de espera’

Estos son los sectores clave que aún no se benefician de la eliminación de  la sobretasa del 15 % 

Si bien el reciente anuncio de eliminación de aranceles entre Ecuador y Estados Unidos ha generado expectativas positivas en ciertos segmentos del sector agrícola ecuatoriano, la incertidumbre invade a exportadores de otros productos que no fueron incluidos en el listado. Entre los sectores afectados destacan el camarón, el brócoli, el atún y otros productos agroindustriales, además de la madera y la cerámica.

El sector camaronero, principal pilar de las exportaciones ecuatorianas, se inquieta tras quedar excluido de la medida arancelaria. José Antonio Camposano, presidente ejecutivo de la Cámara Nacional de Acuacultura (CNA), señaló que para el sector es clave eliminar la sobretasa del 15 %. Tras el anuncio del listado, “hay dos efectos que se han experimentado hasta el momento: el primero tiene que ver con la incertidumbre de no saber cuál es la tasa que se paga o se pagará en el corto o mediano plazo”.

Empleados que mensualizan su décimo tercero reciben pagos proporcionales junto a su salario.

Décimo tercer sueldo: qué ocurrirá con los trabajadores que mensualizan el beneficio

Leer más

El dirigente gremial destacó un factor adicional que complica la situación: Ecuador negocia bajo el esquema DDP (Delivered Duty Paid o Entregado con Derechos Pagados), lo que significa que los exportadores ecuatorianos deben asumir el costo de los aranceles del camarón enviado a Estados Unidos.

“A pesar de tener una tasa ligeramente más baja que otros países, esa diferencia no es suficiente para desplazar a nuestros competidores. Por ello, hoy India sigue siendo el principal proveedor de camarón a los Estados Unidos”, explicó Camposano.

Según el representante de la CNA, la situación actual “no permite certezas que motiven a hacer inversiones para crecer sustancialmente en dicho mercado”, lo que podría limitar el potencial de expansión del sector camaronero ecuatoriano en su principal destino de exportación.

Con expectativas similares está el sector maderero. Christian Riofrío, director ejecutivo de la Asociación Ecuatoriana de la Industria Forestal y de la Madera (AIMA), apunta que, al no calificarse como producto agrícola, la meta es que la madera logre ingresar en un siguiente listado de productos industrializados. “Las negociaciones han sido intensas y seguimos en ese trabajo conjunto hasta definir los listados finales. En nuestro caso, el arancel depende del producto: algunos tienen el 15 % (la base), otros el 23 % y hasta un 25 % en el caso de los muebles”.

Riofrío menciona los mayores esfuerzos que los comerciantes deben hacer desde septiembre pasado, cuando el arancel subió del 10 al 15 %. En ciertos casos, dice, es el importador quien asume la sobretasa, “pero hay situaciones en las que el exportador ha tenido que sacrificar márgenes para compartir el impacto y no perder competitividad en el mercado frente a los clientes finales”.

Desde el pasado jueves, 105 productos de origen ecuatoriano que no se producen de manera significativa en el mercado estadounidense dejaron de pagar una sobretasa arancelaria del 15 %. Entre estos productos se encuentran banano, café, cacao, piñas, mangos, pitahaya, jugos de frutas, especias, banano, palmito, plátano, naranja, tomate y otros.

Ese listado de productos beneficiados, explica Xavier Rosero, presidente ejecutivo de la Federación Ecuatoriana de Exportaciones (Fedexpor), cubre entre el 30 y 35 % de las ventas que se dirigen al mercado norteamericano.

Negociación bilateral

El camarón no es el único producto relevante que quedó fuera de la lista. Rosero    enfatiza que el brócoli, el atún procesado y la madera ecuatoriana, que en los últimos años han ganado reconocimiento internacional por su calidad, tampoco se benefician por ahora de la eliminación arancelaria. Rosero aclara que la negociación no está cerrada. La idea es que más productos se incorporen al listado en una fase de negociación bilateral.

Imagen referencial al Black Friday

Black Friday: ¿Cómo comprar de forma inteligente y evitar sobreendeudarse?

Leer más

Aunque productos como el camarón ecuatoriano —considerado competencia para la industria acuícola estadounidense— pueden hacer el proceso más complejo, Rosero insiste en que no es imposible. “Usualmente, con quienes competimos es justamente con los países que le generan un mayor déficit comercial a EE. UU. y que, además, tienen estándares más débiles en términos de calidad, cumplimiento y temas laborales o cambiarios, que es una de las principales preocupaciones de EE. UU.; un problema que con nosotros no tendrían al estar dolarizados”.

EE. UU., además, no ha logrado ser autosuficiente con ciertos productos. Si bien produce camarón, brócoli o atún, requiere complementar su oferta con producción extranjera. En ese sentido, añade, hay otra oportunidad.

“Nuestra visión es que, si necesitan seguir comprando, lo hagan con un socio preferencial con quien ya han encaminado un acuerdo de entendimiento comercial y de seguridad, como es el caso de Ecuador. Si esto no ocurre, EE. UU. seguirá aprovisionándose, pero justamente de socios con los que ha tenido observaciones por el déficit que les generan o por los estándares que manejan”.

La negociación, dice Rosero, se seguirá impulsando a nivel diplomático. La expectativa es que no se dilate y avance hacia su cierre sobre la base de estos intereses puntuales. Rosero espera que esto se defina antes de que termine el mes o, a más tardar, a inicios de diciembre.

¿Te gusta leer Diario EXPRESO? TE PUEDES SUSCRIBIR AQUÍ