El número de patrocinadores depende del personaje y del caso. Hay abogados que asumen las defensas de los procesados por amistad, parentezco, altruismo o por honorarios que un abogado en libre ejercicio puede pactar libremente con el cliente.

El artículo 323 del Código Orgánico de la Función Judicial señala que la abogacía es una función social al servicio de la justicia y del derecho.

Dice además que es una garantía fundamental de toda persona ser patrocinada por un abogado de su libre elección, recuerda Miguel Revelo, abogado de Carlos Pareja Yannuzzelli, exministro de Hidrocarburos del correísmo.

Pareja Yannuzzelli ha tenido dos abogados para sus casos. Al inicio fue patrocinado por Reinaldo Zambrano quien fue sustituido por Miguel Revelo.

Pareja ha recibido hasta el momento cinco condenas. La última de seis años y ocho meses vino el 13 de septiembre y fue por tráfico de influencias. Tiene cinco años por cohecho, seis años por asociación ilícita, 10 años por peculado y 10 años por enriquecimiento ilícito.

En el otro extremo Rafael Correa, expresidente prófugo por el secuestro del activista Fernando Balda. Para los procesos que ha seguido en contra de periodistas, activistas, políticos y otros, ha contado con el patrocinio de alrededor de una docena de abogados. Solo en el caso del secuestro de Balda tuvo al menos siete defensores.

En la lista total estuvieron Gutemberg Vera y su hijo Alembert, para el caso Banco del Pichincha. Caupolicán Ochoa, su hijo César, Rómulo Argudo, Luis Molina, Fausto Jarrín y Yadira Cadena fueron del equipo en el caso Balda por el que tiene llamado a juicio.

Para Sobornos 2012-2016 ha contado con Alexis Mera, exsecretario jurídico (también procesado), Fausto Jarrín y Carlos Alvear, también defensor de Mera. Jarrín además patrocina a la prefecta de Pichincha Paola Pabón en una demanda civil por daño moral presentada en contra del periodista Christian Zurita y del activista Fernando Villavicencio.

La prefecta es investigada por presunta rebelión en el contexto de la protesta indígena de octubre.

Jarrín ayuda a Pabón en la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH). “Yo no le he cobrado nada a Paola, lo resolveremos cuando esté libre, yo soy abogado también en el tema internacional de ella”, confirmó.

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Pero él es solo uno de al menos cinco defensores que integraría el grupo legal de la prefecta. En el tema penal interviene el exasambleísta de Suma y excandidato vicepresidencial por FE, Ramiro Aguilar junto con Freddy Ron.

¿Cuánto cuesta una defensa? Las cifras varían. Un abogado en el caso Sobornos señala que lo mínimo que debería cobrarse es 3.000 dólares mensuales para una instrucción que puede durar cuatro meses.

¿La razón? En casos complejos como el de Sobornos, los abogados han sido los que más tiempo han invertido en el estudio del caso, asistencia a versiones y audiencias de Criminalística. El abogado reconoce que un trabajo de esos pudiera costar 150.000 dólares. Interesarse en una defensa también tiene motivaciones mediáticas.

El defensor de Yannuzzelli, Revelo, destaca que aunque los honorarios se pactan libremente con el cliente las defensas técnicas en materia penal cuestan mucho dinero. Pero cree que no todo es dinero. Está convencido de que el Derecho debe servir a las personas y a la sociedad para mantener el equilibrio en su relación.

Felipe Rodríguez es socio de Eduardo León en su estudio jurídico. Ambos patrocinaron a Balda y en el camino conocieron a Jairo Lalaleo que se sumó a la defensa. Aclara que ellos, por casos políticos, como el de Balda, no cobran honorarios. El costo fue de copias y otros gastos.

Rodríguez reconoce que el de Balda fue un caso tan exprimente que los honorarios hubiesen oscilado entre los 40.000 y 80.000 dólares.

Patrocinio

Ocho detrás de Ola Bini

Sin ser expresidente, el informático sueco Ola Bini, investigado por acceso no autorizado a sistemas informáticos, contó con alrededor de ocho abogados de Derecho penal, procesal, constitucional y derechos humanos.

Lo encabezó Carlos Soria quien, durante el trámite de la instrucción aseguró que el trabajo era ‘ad honorem’ y contaba con aportes de mucha gente.