
Paro nacional: la pugna en las calles y ahora de acusaciones
El Gobierno asegura que grupos criminales están detrás del paro y la Conaie le responde. Las calles siguen calientes
El Gobierno Nacional y la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie) tienen otra ‘pelea’ aparte de la que se da en las calles en el marco del paro nacional. El segundo día se vio marcado por un aumento en el tono de las protestas y un claro señalamiento del Ejecutivo a que las protestas son en el fondo “operaciones articuladas con estructuras criminales”.
¿En qué se basa? En que entre los 44 detenidos hasta pasado las 16:00 del martes 23 de septiembre de 2025, todos registran antecedentes penales, dos son de nacionalidad venezolana que ingresaron ilegalmente al Ecuador y que tendrían vínculos con organizaciones transnacionales del crimen como el Tren de Aragua, según informó el Ministerio del Interior en un comunicado oficial.
En respuesta, la Conaie emitió un pronunciamiento en su cuenta oficial de X en el que rechazó la polarización en la que cae el discurso oficial al acusar que la movilización es parte de una estrategia organizada por mafias criminales.
“Entre los detenidos hay luchadores sociales, campesinos, jóvenes, mujeres y líderes que ejercen su legítimo derecho a la resistencia. Criminalizar la protesta es un acto de manipulación política que busca debilitar las demandas del pueblo y ocultar la responsabilidad de su gobierno frente a la crisis económica, social y democrática”.
El panorama por el paro va cambiando conforme avanzan los días. Con el cierre de vías en la Sierra norte y en otros puntos del país, el martes la paralización se afianzó en su segunda jornada. Mientras el Gobierno insiste en que el subsidio al diésel es insostenible, las comunidades aseguran que mantendrán la resistencia en las carreteras “día y noche” hasta obtener una respuesta.
Otavalo, por ejemplo, amaneció desolado, con piedras y palos sobre calles y aceras. Las manifestaciones contra la eliminación del subsidio al diésel continuaron. En el cuartel de la Policía Judicial, donde se concentró la violencia el lunes, el cerramiento fue derribado y siete vehículos fueron incinerados. Las autoridades cercaron el área y desplegaron al menos 20 policías para resguardar el sitio. Vecinos del sector contaron que la furia se desató tras un atropello.
En Peguche, parroquia perteneciente a Otavalo, al menos 200 comuneros se concentraron desde las primeras horas. Armados con palos y piedras, cerraron la vía Panamericana con la quema de llantas y madera. Varias volquetas descargaron escombros en el asfalto para reforzar el bloqueo e impedir el paso vehicular.
En Natabuela, otra comunidad de la provincia de Imbabura, los cierres comenzaron de madrugada. Decenas de comuneros de zonas aledañas se instalaron sobre la E35, impidiendo el tránsito vehicular. Solo se permitió el paso a pie o en bicicleta. Tampoco hubo enfrentamientos con policías o militares. Los manifestantes habilitaron un corredor humanitario para ambulancias y vehículos de emergencia.
En Tabacundo y Cayambe, cantones de Pichincha, también se registraron cierres en la E35. Con piedras, palos y neumáticos encendidos, los habitantes bloquearon los accesos principales, generando que cientos de personas se vieran obligadas a caminar largos tramos o a trasladarse en camionetas que asumieron el transporte entre bloqueos.
La vía Babahoyo-Montalvo se convirtió ayer en escenario de violencia luego de que un grupo de agricultores y dirigentes del Seguro Campesino bloquearan el tramo en el recinto 24 de Mayo.

La protesta, que en un inicio se presentó como una medida pacífica de presión, derivó en enfrentamientos cuando un piquete de la policía arribó al lugar. Los uniformados intentaron persuadir a los manifestantes para que se retiraran, pero el diálogo se rompió en medio de empujones, gritos y la resistencia de los agricultores.
El hecho más grave lo sufrió el jefe del Distrito Babahoyo, Pablo Borja, quien en medio de la gresca recibió un machetazo en la mano derecha. Borja fue trasladado a una clínica en Babahoyo, donde médicos confirmaron que la lesión requirió una sutura de ocho puntos.
Paralelamente, durante las acciones de dispersión, los uniformados capturaron a dos ciudadanos. Los detenidos fueron trasladados bajo custodia policial ante la justicia.
Los dirigentes campesinos, encabezados por Ramón Flores aseguraron que las protestas continuarán mientras no existan soluciones concretas a las demandas del sector rural.
¿Quieres acceder a todo el contenido de calidad sin límites? ¡SUSCRÍBETE AQUÍ!