Medardo Mora Solórzano | El país se pronunció
El Gobierno debe tomar las cosas con serenidad, rectificar lo que deba corregir y avanzar en lograr mayor seguridad
En anterior comentario señalaba que la Consulta planteada era plebiscitaria. Los ciudadanos no se pronunciaron por el contenido de las preguntas, expresaron mayoritariamente su desacuerdo con la gestión que el presidente Noboa está realizando, haciéndole notar que ejercer la primera magistratura del país es un elevado honor, pero al mismo tiempo una gran responsabilidad.
Este resultado obliga al presidente a comprender que gobernar no es solo promoción propagandística, exige conocimientos de la realidad nacional y acciones concretas que respondan a superar necesidades y aspiraciones sociales, ser sensible a la angustia de sectores de atención prioritaria, como los adultos mayores, que le dieron su respaldo en su elección, pero a quienes no se les devuelve por varios meses el IVA, que muchos necesitan para su supervivencia; sería comprensible un atraso de hasta dos meses para depurar la información. Tampoco es aceptable que no se haya normalizado una debida y más transparente atención a la salud, ni es justificable la falta de mantenimiento de carreteras. En resumen, hay un llamado de atención a la autosuficiencia del Gobierno que lo distancia de la realidad que viven los ecuatorianos.
No creo que ningún grupo en particular deba sentirse el triunfador, los números no mienten. Y lo que sí es evidente es que existe un porcentaje de ecuatorianos alejados de posiciones políticas partidistas sectarias, que piensan en el país y en la solución de sus problemas, que respaldó electoralmente al presidente en abril pasado; pero ese porcentaje estimado en un 20 % siente que el Gobierno no está respondiendo a sus expectativas, que los puntos planteados en una costosa Consulta pudieron tramitarse con reformas parciales, legales o constitucionales, sin necesidad de una Asamblea Constituyente; al igual que no es indispensable instalar bases militares extranjeras cuando se pueden firmar convenios de cooperación militar que requieren aprobación de la Asamblea Nacional.
El Gobierno debe tomar las cosas con serenidad, rectificar lo que deba corregir y avanzar en lograr mayor seguridad y bienestar para el conjunto de la población.