Calle 10 de Agosto
Ícono. Debido a la ubicación de la Casa Consistorial (hoy Palacio Municipal), la calle 10 de Agosto era conocida como de la Municipalidad en el siglo XIX.Gerardo Menoscal

República de Guayaquil: El nuevo nombre que intenta encajar en la historia porteña

Investigadores señalan que aquella denominación no se apega a los hechos

El tema surgió esta semana. Que existía una iniciativa para cambiarle el nombre a un tramo de la calle 10 de Agosto por el de República de Guayaquil, adelantó el alcalde Aquiles Álvarez, el pasado miércoles. El segmento comprende apenas tres cuadras de esa vía, desde Chile hasta avenida Malecón Simón Bolívar. Un día después, esa propuesta fue mocionada y aprobada en la sesión ordinaria del Concejo Cantonal.

Dicha iniciativa fue sugerida por la Academia Nacional de Historia, capítulo Guayaquil. Su directora, Antonieta Palacios, señaló a EXPRESO que el objetivo era rememorar y enseñar a las nuevas generaciones la “Provincia de Guayaquil”, nombre que tomó este territorio entre los años 1820 y 1822, luego de la gesta libertadora.

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El proyecto original enviado al Cabildo contemplaba nombrar como Provincia de Guayaquil un segmento de la calle 10 de Agosto. Luego, la Unidad Técnica de Patrimonio Cultural del Municipio realizó un análisis de la propuesta, que fue entregado a los ediles para su aprobación en el Concejo, con el nombre de República.

Pero hay reacciones a esta nueva denominación. Javier Castillo, investigador histórico e integrante de la fundación Bienvenido Guayaquil, señaló que la denominación de “República de Guayaquil” no existió en el reglamento provisional aprobado en noviembre de 1820.

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“Están jugando un poco con lo simbólico. Si la idea es tratar de rescatar esa etapa como provincia, todo el tema de la independencia, se fueron por la tangente”, dijo el investigador.

Incluso en la sesión de Concejo, el pasado jueves, dos ediles de la Revolución Ciudadana, Arturo Escala y July Álvarez, se abstuvieron de votar para aprobar el cambio de nombre.

“Tengo que expresar que me abstengo, porque iría en contra de mis creencias en la parte de denominar a la calle 10 de Agosto como República de Guayaquil, porque bien lo han dicho, fue la Provincia de Guayaquil, pero no hubo República de Guayaquil”, expresó Escala.

La concejal Álvarez calificó como ‘mensaje divisorio’ la modificación del nombre de la calle 10 de Agosto. “La denominación República de Guayaquil nace de la oligarquía guayaquileña, ese pequeño porcentaje de población que no comprende que el país necesita de todos y todas para salir adelante y en el año 2000 promovieron un régimen autónomo para nuestra ciudad”, publicó en X.

La vicealcaldesa de la ciudad, Blanca López, insistió en que esta decisión no debe ser interpretada como “un acto que pretenda menoscabar la unidad nacional o que busque algún tipo de separatismo”.

Calle 10 de Agosto
Espacios. La Biblioteca Municipal es uno de los inmuebles emblemáticos del Puerto Principal que cruza esta céntrica vía, que nuevamente cambió de denominación.Gerardo Menoscal

No obstante, el investigador histórico Castillo coincidió con la edil Álvarez en que esta medida puede generar inconformidades, “al reemplazar una fecha tan importante para el país”.

Agregó que esta medida también debe contemplar proyectos en paralelo. “Si la idea era revalorizar a la ciudad, está muy bien en ese sentido, pero podría haberse puesto algo más cultural, recorridos, mostrar la importancia de los edificios que están allí, el porqué de la importancia de este sector para la ciudad”, manifestó.

El líder comunitario Fernando Alburquerque también señaló de que este cambio de nombre puede tener un valor histórico y cultural significativo.

calle 10 de Agosto

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“Sin embargo, para que este cambio sea bien recibido, debe ir acompañado de acciones concretas que aborden las necesidades más apremiantes de la ciudadanía en términos de seguridad y obras públicas. La falta de cumplimiento de las promesas de campaña puede resultar en un profundo descontento y pérdida de confianza en las autoridades. Por lo tanto, equilibrar los actos simbólicos con mejoras tangibles es crucial para mantener el apoyo y la satisfacción de la población”, sostuvo.

En el Puerto Principal existen otros casos de calles que han sido renombradas por tramos, pero la ciudadanía mantiene su denominación original. Por ejemplo, un segmento de la calle San Martín, en el centro sur, pasó a llamarse Club Sport Emelec, desde la ría hasta avenida Quito.

“Hay pocas personas que le dicen a un taxista ‘lléveme a la calle Club Sport Emelec y Eloy Alfaro’. Es más una representación simbólica. Por eso la importancia de generar actividades para justamente promover la historia de las calles”, dijo Castillo, de Bienvenido Guayaquil.

La ciudadanía también se cuestionan los temas prioritarios abordados por el Concejo.

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