Buenavida

Quince artistas muestran que “el arte no se enferma”

Con pinturas y esculturas plasman lo que llaman un autorretrato espiritual en tiempos de pandemia. Hay quienes retratan el dolor y otros la esperanza

Obras
‘El ying y el yang del virus’ formó parte de esta exposición.Cortesía

Del cuadro cuelgan mascarillas, guantes y gorros. Están pegados debajo del dibujo de un mapa del mundo sobre el que hay un hombre en cuclillas frente a una cruz; de un lado se ve al virus y del otro a un grupo de personas. La artista Vilma Santillán tituló a su obra ‘El virus que nos encerró’ y con ella mostró su percepción sobre la COVID-19, que creyó que no llegaría al país, pero que terminó afectando a gente cercana.

Es un autorretrato espiritual en época de pandemia, describe la arquitecta Rosa María Friend, pintora y gestora cultural que organizó la muestra ‘El arte no se enferma’.

Quince artistas participaron en esta exposición plasmando sus sentimientos a colores. “Con diferentes técnicas y materiales que tenían en ese momento hicieron este trabajo de carácter conceptual, que escribe una historia que no debemos olvidar”, cuenta.

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El doctor Manuel María Zeballos fue el curador de la muestra que se realizó hace pocos días en Guayaquil y en la que también destacó una escultura llamada ‘Ausencia’, elaborada por Narcisa López con la técnica del barro modelado. Refleja el grito de angustia, el dolor ante la pérdida de un ser querido y la incertidumbre e impotencia de quienes no lograban recuperar los cuerpos de sus familiares.

Caruz Gruber mostró al ‘Visitante inesperado’. Lo hizo destacando un zapato, ese que acompaña en el recorrido diario, pero que un día tuvo que comenzar a quedarse fuera de casa porque podían llevar el virus al hogar.

Obra
‘Ausencia' muestra el grito desesperado de quienes perdieron a un ser querido en la pandemia.Cortesía

Cada artista plasmó en el arte lo que vivió en los días de encierro. Solange Argüello dio vida a ‘Cuarentena y libertad’.

“En los momentos adversos que experimenté fue muy importante tener una actitud positiva. El optimismo me inspiró a sentirme libre dentro del encierro. Cuando los sentimientos de estancamiento me invadieron, accioné la esperanza y deseché el miedo. Esos fueron momentos de verdadera libertad”, confiesa.

Rossana Martínez plasmó su percepción de una forma diferente. Creó ‘Doble crucifixión’, porque para ella fue no solo sufrir el embate del virus sino además tener que lidiar con la corrupción. Por eso, en la cruz que pintó se simulan fundas plásticas que tienen cuerpos ocultos junto a dibujos de rostros macabros.

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Hay a quienes la pandemia los llevó a pensar en lo que vendrá. “En mi obra expreso mi sentir por el futuro de nuestros nietos por la incertidumbre de no saber qué pasará con sus sueños y proyectos, no saber si podrán escoger las metas que deseen como lo hicimos nosotros”, dice Magaly Moscoso sobre esta pandemia que cree que no acabará pronto.

Obra
‘El virus que nos encerró’ retrata la nueva normalidad en la que vivimos.Cortesía

En esas formas de ver la pandemia, Robin Echanique pensó en ‘La espera’. Él reflejó a una joven guitarrista que anhela compartir con la música, la ilusión de vivir en una época normal después de que todo pase.

Así están también quienes tuvieron una visión distinta con ‘Mis angustias en Tik Tok’ y ‘Una fotito para el Insta’. Ulvia Flores, David Castillo, Sicilia Loffredo, Lorena Parrales, Líder García, Richard Verduga y Carmen Barreiro fueron parte de esta muestra en la que quisieron reflejar lo que para ellos ha sido este virus.