Los sonidos influyen en el comportamiento humano. Algunos como el ruido de las calles o el que proviene de una corneta o taladro pueden ser agobiantes y estresantes, mientras que otros como el canto de las aves, una terapia para combatir la ansiedad y depresión, motivando a la calma. Así lo determina un estudio liderado por la neurocientífica Simone Kühna, del Grupo Lise Meitner para Neurociencia Ambiental en el Instituto Max Planck (Alemania).

Basta con caminar una hora por el bosque o la naturaleza para reducir la actividad cerebral relacionada con el estrés, pero sobre todo, escuchar el canto de una o más aves permite que el cuerpo entre en un estado de tranquilidad y relajación, enfatiza la investigadora.

En el ensayo participaron 95 personas que, previo a llenar unos cuestionarios de depresión, ansiedad y paranoia, fueron expuestas por 6 minutos, a una de las siguientes pruebas: ruido de tráfico bajo, ruido de tráfico alto, canto de pájaros bajo y canto de pájaros con paisajes sonoros de gran diversidad.

El resultado concluyó que el ruido del tráfico se asocia con mayor índice de la depresión, mientras que el cántico de los pájaros disminuye considerablemente no solo los estados depresivos sino también la ansiedad y paranoia.

Y aunque lo ideal es entrar en contacto directo con la naturaleza, respirar su aire, maravillarse de su color y olor, los investigadores sostienen que escuchar grabaciones del canto de las aves también es válido para prevenir los estados de angustia y otros trastornos mentales.

El efecto positivo que tienen los sonidos de las aves en la salud humana ha sido motivo de algunos estudios. La lluvia cayendo sobre el techo, las olas rompiendo en la orilla de la playa, el crepitar de la leña en el fuego o el murmullo de un arroyo son sonidos que se relacionan con la calma. "Como ornitólogo siempre he tenido el canto de los pájaros como la banda sonora natural de mi vida y creo que es bueno para mi mente y mi alma. Este cántico nos acerca a la naturaleza y une a la gente a los lugares y a los recuerdos como pocos sonidos", apunta Peter Brash, ecologista de la organización británica National Trust.

Disfrutar de la naturaleza es un placer que se debe vivir con intensidad. Es accesible a todos y sobre todo, es gratis.

Pendiente

A criterio de Simone Kühna, aún hace falta más ensayos sobre el melodioso mundo de las aves que permitan conocer cómo la gente responde a distintos cantos, por ejemplo comparar el de un cuervo con el de graznido de los gansos, que quizás, provoquen desesperación en algunas personas.

Las 5 aves con los cantos más bonitos

Tener un ave en casa, sin dudas, alegrará sus días. Disfutará de sus intensos colores, y lo mejor de todo, de su fabuloso canto. Aquí los 5 mejores cantores según expertoanimal.com

• 1. El jilguero. Es muy conocido la hermosa voz que de esta ave, al punto que se han desarrollado concursos en los que muchos orgullosos propietarios han mostrado su calidad sonora.

• 2. El canario. La hembra y el macho emiten un bonito canto. El del macho suele ser más elaborado e intenso.

• 3. El mirlo. Aunque no es habitual tenerlo como mascota, es conocido como "El Beethoven de los pájaros". Además de ser muy inteligente, es capaz de aprender una completa variedad de cantos creando por sí solo melodías bien trabajadas.

• 4. El ruiseñor. Sus colores son parduzcos, muy sencillos, en comparación con su melódica voz. A diferencia de otros pájaros, no solamente canta a primera hora de la mañana y al atardecer. Al ruiseñor le gusta cantar hasta bien entrada la noche, sorprendiendo en el silencio de la oscuridad.

• 5. El petirrojo. Este pájaro destaca su elegante corbata de colores rojizos. No obstante, su delicado canto atrae a cualquier amante de las aves.