
Seguramente alguna vez ha tomado o ha estado tentado a consumir una de las tan promocionadas pastillas para adelgazar o un té desintoxicante. Sin duda, esas opciones “milagro” atraen, precisamente por eso, por asegurar que se perderá peso en poco tiempo y sin ningún esfuerzo.
¿Pero alguna vez se ha detenido a pensar en cuáles pueden ser los efectos para su salud? Los médicos insisten en que tomar estas píldoras para bajar de peso o laxantes pueden llevarlo a la larga a tener problemas de presión arterial alta y de daño a los riñones o al hígado. Pero un estudio publicado en American Journal of Public Health muestra otro efecto. Los investigadores hallaron que esta es una puerta abierta a sufrir trastornos alimentarios.
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Para este estudio revisaron los datos de 10.058 mujeres y niñas de 14 a 36 años. Encontraron que algunas de quienes habían tomado pastillas para adelgazar durante un año, recibieron un primer diagnóstico de trastorno alimentario dentro del año o tres años siguientes a su ingesta. Pasó algo similar con quienes consumieron tés desintoxicantes o laxantes.
Es algo a lo que hay que prestar atención, pues estos trastornos de la alimentación son manifestaciones extremas de una variedad de preocupaciones por el peso y por la comida experimentados por mujeres y hombres. Estos incluyen la anorexia nerviosa, la bulimia nerviosa y el comer compulsivamente.
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Los autores de este trabajo sugieren políticas que restrinjan el acceso a estos productos y que además se prohíba su venta a menores de edad.
Dicen que este estudio es una advertencia para comenzar a poner más atención a la salud y no dejarse llevar por lo que ofrece un rápido resultado. Por el contrario, esta es una oportunidad para que usted cambie sus hábitos, empiece a hacer al menos 30 minutos de caminata, a disminuir la cantidad de comida en su plato y a comer algo a la media mañana o a la media tarde, pero no chatarra.