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Milei, Bukele y Carlo Acutis
Políticos y un religioso que usaron las redes sociales con propósitos diferentes.Expreso

Bukele, Milei y Carlo Acutis: poder, influencia y contrapoder en la era digital

Análisis Estratégico: Desde Bukele y Milei hasta Acutis, cómo poder, influencia y contrapoder se disputan la era digital

En el mundo actual, tres fuerzas moldean nuestras sociedades: el poder, la influencia y el contrapoder. Cada una opera de manera distinta, pero juntas definen cómo se toman decisiones, se forman opiniones y se equilibran los excesos. El poder impone decisiones a través de instituciones o coerción. La influencia persuade sin forzar y a través de plataformas digitales. El contrapoder, en cambio, surge para cuestionar al poder dominante, promoviendo rendición de cuentas desde la sociedad civil, la prensa o figuras independientes.

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Bukele, presidente de El Salvador, redujo drásticamente la violencia de pandillas, pero a costa de un estado de excepción prolongado y detenciones masivas que han generado críticas por violaciones a derechos humanos. Reelegido en 2024, a pesar de restricciones constitucionales consolidó un poder casi absoluto. Su estilo combina decisiones contundentes con una imagen carismática en redes sociales; demuestra cómo el poder puede fusionarse con la influencia para reforzar la autoridad. Sin embargo, este enfoque, justificado y apreciado por muchos, invita a contrapoderes, como ONG internacionales o medios a cuestionar su autocracia.

El poder blando, concepto desarrollado por Joseph Nye, se refiere a la capacidad de influir sin coerción, apelando a la cordura, la cultura o los valores compartidos, y opera de manera más sutil, moldeando opiniones. Así lo hace la prensa seria e independiente. Usualmente basada en investigaciones y opiniones sólidas, sigue marcando agendas y es la que da a conocer verdades incómodas.

Como contrapoder la prensa equilibra narrativas oficiales promoviendo transparencia y honestidad. A diferencia del poder de mandatarios como Bukele, Milei o Trump, que gobiernan y comunican con estilos similares por medio de redes sociales, la prensa persuade, pero su influencia no está exenta de críticas; no todos comprenden su rol.

El influencer de Dios

San Carlo Acutis representa una nueva forma de influencia. Este joven italiano, conocido como el ‘influencer de Dios’, usó internet para evangelizar en una era pre-redes sociales. Creó sitios web para documentar milagros eucarísticos y atrajo a jóvenes y escépticos. Se convirtió en un modelo y su legado inspira a millones

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Lo que distingue a Acutis de los ‘influencers’ publicitarios o políticos es su falta de agenda personal. Mientras muchos de estos buscan fama, contratos con marcas o poder político, Acutis usó la web para un propósito altruista: acercar a las personas sin esperar reconocimiento. No vendía productos ni promovía ideologías partidistas; su influencia era ética y enfocada en valores eternos. A diferencia de ‘influencers’ que monetizan su alcance en Instagram y TikTok, él no buscaba ‘likes’ o votos. Su impacto atrajo a la Generación Z y obligó al Vaticano a abrazar la evangelización digital, un cambio estructural sin precedentes.

El poder político, ganado democráticamente o no, impone cambios inmediatos, pero puede ser frágil si carece de legitimidad. La influencia de la prensa independiente persuade y vigila, actuando como contrapoder y por eso está bajo ataque alrededor del mundo.

Carlo Acutis, sin embargo, muestra que la influencia auténtica, libre de intereses comerciales o políticos, trasciende generaciones y transforma instituciones desde abajo. En un mundo donde los ‘influencers’ priorizan lo efímero, Acutis enseña a líderes y ciudadanos que es posible usar las plataformas digitales no para dividir, sino para unir en pos de un bien mayor. ¿Podrán hacer eso los políticos?

La pregunta ahora es: ¿dónde estás usted? ¿Sometido al poder? ¿Atrapado por la influencia? ¿O formando parte del contrapoder?

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