
Belén Encantado: el pesebre animado más grande de Sudamérica deslumbra en Quito
Desde la Basílica del Voto Nacional, en este Paseo Express, te contamos sobre el Belén Encantado, que tiene 1700 figuras
El Belén Encantado de Quito es considerado el pesebre animado más grande de Sudamérica, con 1.700 figuras —650 de ellas en movimiento— distribuidas en 280 metros cuadrados dentro de la Basílica del Voto Nacional. La muestra combina arte, tecnología, sonido, luz y efectos especiales como lluvia y amaneceres, convirtiéndola en una de las experiencias navideñas más visitadas y sorprendentes del país.
Aunque se encuentra disponible desde finales de octubre, es en este diciembre cuando llegan la mayor cantidad de visitantes al Belén Encantado, que ya es una tradición de la época navideña. El pesebre nació hace 21 años en Loja y con el pasar del tiempo se ha ido perfeccionado en calidad artística y efectos de movimiento.
La visita a esta exhibición se ha vuelto una de las favoritas para las familias quiteñas, pues además se encuentra en el centro histórico, en la emblemática Basílica del Voto Nacional. En este Paseo Express repasamos los detalles más interesantes del pesebre y todo lo que se necesita saber para poder conocerlo.

Recuperar en sentido de la navidad
La intención de este pesebre, cuando fue creado en Loja por el ya fallecido padre Jimmy Arias Piedra, fue contar a los más pequeños la historia bíblica de Jesús, pues consideraba que en la actualidad la idea de Papá Noel y los regalos fue dejando de lado el conocimiento sobre la fiesta navideña desde la perspectiva religiosa.
Inicialmente la estructura tuvo diez metros, pero poco a poco fue incrementando en figuras, estructuras de casas, templos y hasta las pirámides egipcias. El trabajo de varios artistas en la capital fue enriqueciendo los detalles del pesebre hasta esta versión moderna apoyada por la tecnología.
Vida cotidiana al detalle
De las 1700 figuras que se exponen, 650 tienen movimiento y van mostrando detalles de la cotidianeidad dentro de las escenas bíblicas que repasan la vida de Jesús desde su nacimiento.
Así, en los 280 metros cuadrados se puede ver figuras de personas y animales en distintas actividades, desde la agricultura, ordeño, horneado de pan, hasta algunas más especificas y llamativas como un hombre en una letrina o una mujer golpeando una rata con una escoba.
Efectos visuales y sonoros

Al entrar al templo principal de la Basílica del Voto Nacional, donde se encuentra el pesebre, inmediatamente los visitantes quedan atrapados por el juego de luces y sonidos que están sincronizados con los movimientos de cada figura. Mientras recorren la muestra, se puede notar como amanece y anochece en las aldeas representadas en miniatura con cambios en la luz del lugar.
Resulta muy atractivo además escuchar audios de voces de niños jugando, pájaros cantando o el gallo resonando cuando amanece. Y no solo eso, hay un rio que transita por la mayor parte del pesebre, con puentes y riveras. Y uno de los efectos favoritos, el de lluvia torrencial con truenos provenientes de nubes suspendidas.
Apoyo a buenas causas
Los fondos que genere esta exposición serán destinados a dos objetivos, según informó el parroco Andrés Moreno. Una parte irá a la Fundación Padre Jimmy Arias Piedra que brinda atención psicológica y psiquiátrica, y otra se usará para obras de refacciones en la Basílica del Voto Nacional.
- Lugar: Basílica del Voto Nacional (Centro de Quito)
- Horario: Lunes a Domingo (09:00 a 18:30)
- Precios: 3 dólares (adultos) y 1,50 dólares (niños)
- Vigencia: Enero 2026
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