
Capturan a falsos repartidores que robaban relojes de lujo en Quito
Una banda internacional operaba disfrazada de deliverys. La Policía recuperó 34 relojes de alta gama
Un nuevo golpe al crimen organizado se ejecutó en Quito. Una banda delictiva dedicada al robo violento de relojes de lujo fue desarticulada por la Policía Nacional, luego de una investigación de tres meses. Sus miembros se hacían pasar por repartidores para cometer los delitos. Su blanco: ciudadanos que portaban relojes de alta gama valorados entre 10.000 y 15.000 dólares.
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El caso más reciente ocurrió en el norte de la capital. Una persona de la tercera edad fue víctima del robo de su reloj mientras compraba en una tienda. Dos sujetos vestidos como repartidores ingresaron al local, se dirigieron directamente al adulto mayor y le arrebataron el reloj. No sustrajeron nada más y huyeron de inmediato.
Este hecho, que en un principio parecía aislado, fue clave para avanzar en la investigación de una estructura criminal que operaba bajo un patrón repetido. Holger Cortez, comandante del Distrito Metropolitano de Quito, explicó que el modus operandi consistía en vigilar a posibles víctimas en centros comerciales, instituciones financieras y otros lugares públicos. Una vez identificados los relojes de alto valor, los delincuentes realizaban un seguimiento hasta que encontraban el momento adecuado para atacar.
“Verificaban que los relojes pertenezcan a marcas reconocidas y que tengan un alto valor comercial. Luego, esperaban a que la víctima llegue a su destino y ahí procedían a sustraerlos”, explicó por su parte Eduardo Serrano, jefe de la Unidad de Investigación.
Operativo simultáneo en cinco sectores
El trabajo de inteligencia culminó con seis allanamientos simultáneos en los sectores de Las Casas, San Carlos, Carcelén, El Condado y Machachi. En el operativo participaron unidades especializadas de la Policía y dejó como resultado ocho personas detenidas, todas de nacionalidad venezolana.
Durante las intervenciones también se registró un enfrentamiento armado en uno de los inmuebles allanados, donde un sospechoso fue abatido. Este individuo tenía una orden de captura internacional por homicidio emitida por las autoridades de Perú.
En total, la Policía incautó 34 relojes de alta gama, dos armas de fuego, 38 municiones, dos motocicletas presuntamente utilizadas para los robos, 1.630 dólares en efectivo, además de cuatro mochilas y chaquetas con logos de empresas de entregas a domicilio.

Una banda altamente estructurada
Según la Policía, esta organización criminal operaba de forma coordinada. Los miembros tenían roles definidos: unos se encargaban de identificar a las víctimas, otros de realizar el seguimiento y un tercer grupo de ejecutar el robo.
Los relojes sustraídos, en su mayoría de marcas como Rolex, Hublot, Omega y Tag Heuer, eran posteriormente vendidos en el mercado negro o enviados fuera del país. El valor total de los objetos recuperados aún está en proceso de peritaje, pero se estima que supera los 300.000 dólares.