Crimen en Santa Elena: entrenador de fútbol infantil fue asesinado ante sus alumnos
El sicariato se cometió junto a una cancha de tierra donde la víctima, conocida como Profe Miguelito, entrenaba con los niños
El asesinato del entrenador de fútbol barrial Pablo Jesús Reyes Pita, de 56 años, ha conmocionado a la ciudad de Santa Elena. Mensajes en redes sociales reflejan el dolor de quienes lo conocieron.
“Es difícil ser indiferente ante el dolor. Quedan los recuerdos, diálogos, experiencias, risas y tristezas. El tiempo nos dejó una gran amistad. Solo las lágrimas silenciosas nos hacen comprender que ya no volveremos a estrechar tus manos”, escribió en Facebook la periodista Lourdes Malavé.
Reyes, conocido en la comunidad como Profe Miguelito, fue atacado por sicarios el lunes 28 de julio de 2025 mientras entrenaba a un grupo de niños en una cancha de tierra del barrio Pacífico Dos.
Según testigos, los atacantes llegaron en motocicleta y dispararon varias veces ante la mirada atónita de los menores. “Trató de correr, pero lo alcanzaron y le dieron varios tiros”, relató un vecino.
Otro testigo afirmó: “El 'profe', al ver a los maleantes, salió a toda velocidad de la cancha para que ningún niño resultara herido. Cuando ya estaba en la calle, recibió las detonaciones”.
El técnico era muy apreciado por su labor con niños y jóvenes. Además, entrenaba a un equipo de fútbol categoría sub-50 en el sector El Tablazo.
Su dedicación al deporte y compromiso con la formación de nuevas generaciones le habían granjeado el respeto de vecinos y colegas.
Agentes de la Policía Nacional recabaron indicios y levantaron testimonios del crimen. Peritos revisaron cámaras de videovigilancia y dialogaron con moradores.
El jefe del distrito Santa Elena, Esteban Guzmán, informó que la víctima tenía antecedentes penales.
Violencia imparable en Santa Elena
Con este nuevo hecho violento, suman 112 las muertes violentas al estilo sicariato en lo que va de 2025 en la provincia de Santa Elena.
Las autoridades reiteraron el llamado a la ciudadanía para colaborar con información que permita ubicar a los autores, mientras la familia del fallecido exige justicia.
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