Opinión

¿Juicio político a María Paula?

Los argumentos expuestos en dos pedidos de juicio político eran la crisis del sistema penitenciario, la inseguridad en el país...

La Comisión de Fiscalización de la Asamblea Nacional en sesión celebrada el 12 de diciembre, negó el pedido del juicio político contra la Dra. María Paula Romo Rodríguez en su calidad de Ministra de Gobierno, al no haberse probado el incumplimiento de funciones y, por tanto, no se justificaron las causales para la interpelación de la secretaria de Estado.

Los argumentos expuestos en dos pedidos de juicio político eran la crisis del sistema penitenciario, la inseguridad en el país, sin considerar que dichos hechos eran consecuencia del gobierno anterior. El primer pedido agregaba el mal uso de bienes públicos.

Hubo sectores ciudadanos interesados, ideólogos sectarios y agitadores subversivos profesionales que tenían interés en la salida de la Ministra de Gobierno, por lo que también se la acusaba de exceso en el uso de la fuerza y represión de la Policía y Militares contra los pacíficos manifestantes que destrozaron la Ciudad de Quito así como en el resto del país, suspendiendo la producción petrolera, el abastecimiento de alimentos y víveres a todas las provincias y de agua a la ciudad de Ambato, saqueos y vandalismo en varias ciudades, quema y destrucción de edificios públicos y privados, y demás actos sediciosos y terroristas, que se produjeron en Octubre pasado; al igual que también se acusó al GRAD. (sp) Oswaldo Jarrín R. Ministro de Defensa Nacional. 

La gran parte de la ciudadanía, afectada por los actos delictivos y del estado de sitio que vivió el Ecuador sostienen lo contrario, que han actuado de manera benévola, permitiendo que quienes protagonizaron los destrozos, saqueos y vandalismo, vulneren los derechos humanos y constitucionales de los ciudadanos.

Me sumo al criterio mayoritario de los ciudadanos, en el sentido que no se ha justificado la falta en el cumplimiento de sus funciones, y por el contrario la actuación de la Ministra María Paula Romo y de Oswaldo Jarrín, han sido de lo más cautelosas en la crisis de octubre, sin vulnerar los derechos humanos de los manifestantes y de los agresores, cosa que sí hicieron ellos contra la ciudadanía ecuatoriana.