El gran testaferro

La extradición a Estados Unidos de Alex Saab arroja luz a un entramado de corrupción del Gobierno de Venezuela. El caso relevado por el periodismo llega hoy también a ojos de las instituciones ecuatorianas.

Cabo Verde ha resistido durante meses la presión para que no extradite a Alex Saab, un empresario colombiano señalado por tener tanta cercanía al régimen chavista que está siendo investigado por ser el presunto testaferro de Nicolás Maduro. Ya está en manos de la Justicia de Estados Unidos, contra viento y marea, en un caso por lavado de activos.

Si a estas alturas, Saab era un anónimo para el ciudadano común ecuatoriano no será porque el periodismo no haya contado la ramificación de sus negocios en Ecuador a través del sistema de compensación Sucre.

La atención que hoy recibe Saab viene de la Justicia pero brota de los medios. Los mismos que han participado en la investigación de los Papeles de Pandora fueron los primeros en publicar las irregulares negociaciones entre el Gobierno de Venezuela y el empresario. Hay periodistas que han tenido que elegir entre su vida, su familia y su lugar de residencia y contar la verdad. Y han preferido lo segundo. Gracias a ellos, hoy se arroja algo de luz a una trama de corrupción internacional que toma ya protagonismo en las instituciones ecuatorianas.