Devolver el IVA a cambio de subsidios

La medida crearía un beneficio general, dejando los precios diferenciados que hoy solo discriminan a los sectores que no reciben el subsidio

Revertir la grave presión que los subsidios a los combustibles originan en la caja fiscal sigue siendo tarea pendiente. Las negociaciones para lograrlo se han estancado, pero el Ejecutivo, con real voluntad para cambiar esta realidad, bien podría emprender otros mecanismos para concretar la retirada de esta política a sectores como el camaronero y atunero que, por sus fortalezas, no requieren de este tipo de ayuda, pero sí de otras compensaciones.

Para hacerlo basta analizar las condiciones que se tienen. Un bono tributario que les facilite mayor deducción de impuestos suena atractivo, pero sin una Asamblea a favor que apruebe una ley para ello sería poco viable. No obstante, existen los decretos, y a través de uno el Gobierno podría de forma inmediata ampliar la devolución del IVA, convirtiéndola un alivio que amortigüe la eliminación de un diésel más barato. Actualmente, este beneficio se aplica a los exportadores de camarón y sus proveedores directos, pero podría expandirse a toda la cadena de proveedores indirectos, haciendo que los costos para producir y vender al mundo sean menores. La medida crearía un beneficio general, dejando los precios diferenciados que hoy solo discriminan a los sectores que no reciben el subsidio, y a la vez, recompensaría la labor del exportador, hoy el principal proveedor de divisas para el país.