Columnas

Partidocracia S. A.

"En el Ecuador no existen verdaderos partidos políticos que puedan ser encasillados realmente con alguna ideología"

Partidocracia es la forma peyorativa del término democracia, por el cual los partidos y/o los movimientos políticos ejercen un poder abusivo en virtud del cual los electores quedan fuera de ejercer influencia.

En el Ecuador no existen verdaderos partidos políticos que puedan ser encasillados realmente con alguna ideología, como el caso de la social democracia, socialismo, conservadorismo, democracia cristiana; etc. Si bien muchos dicen pertenecer a una u otra tendencia o ideología, por su estructura y accionar se desmarcan de lo teórico para revelar “estructuras políticas familiares”, cuyo objetivo es detentar el poder, encubriendo verdaderos cacicazgos.

Lo manifestado es fácilmente comprobable si comparamos los países del primer mundo, claramente identificados con sus ideologías y principios, ejes sobre los que gira su accionar político partidista. Así tenemos: los Demócratas y Republicanos en EE. UU.; Partido Socialista Obrero Español-PSOE, Partido Popular, etc. En cambio, en la política ecuatoriana los cacicazgos se revelan con base en el personaje que los representa, que por lo general es el “dueño” del partido o movimiento político y así tenemos: velasquismo, nebotsismo, roldosismo, etc.; tal es así, que desaparecidos los “dueños”, sus partidos o movimientos desaparecen con ellos, como el caso del CFP.

No existen 283 ideologías políticas en Ecuador que justifiquen ese número de tiendas políticas, las que en períodos electorales reciben por ley dinero directamente del CNE y al margen de este, de “contribuyentes anónimos”, lo que incentiva muchos “emprendimientos partidistas”; eso a más de la posibilidad del alquiler del movimiento a candidatos separados de sus partidos originarios, pero interesados en no abandonar la arena política. Ejemplos: la candidatura del correísmo, auspiciada por Centro Democrático de J. Jairala, y la de A. Noboa auspiciada por el movimiento Justicia Social, del esposo de Pamela Martínez, ex mano derecha de Correa. Solo así podremos entender la proliferación de empresas electoreras a las que por sus prácticas las hemos denominado Partidocracia S. A.