Es un acierto del presidente G. Lasso el programa de microcréditos de hasta cinco mil dólares a través de BanEcuador, para financiar actividades de pequeños emprendedores. Aquello ayudará en especial a microproductores agropecuarios que podrán resarcirse de pérdidas sufridas por el duro momento que viven. Por una parte, los precios de sus productos permanecen estancados, mientras por otra parte, los costos de producción han subido en elevados porcentajes, provocando que pequeños ganaderos o agricultores hayan tenido que deshacerse de sus pocas reses o tenido que reducir el área de terreno que siembran, al encarecerse los insumos que utilizan.

Una real reactivación de la actividad productiva primaria requiere líneas de crédito a largo plazo y bajo interés, más aún al ser el Ecuador un país dolarizado, que necesita ser competitivo con mercados financieros de países con monedas duras, los cuales mantienen políticas crediticias a bajo interés. Por ello este programa de microcréditos tiene que ser forzosamente complementado con otras líneas de crédito en montos muy superiores; aunque el plazo sea inferior, podría ser alrededor de 10 años.

Se espera que se corrijan vicios administrativos y éticos en la tramitación de créditos al campesino, al que normalmente le solicitan dinero, algún producto o aves de corral que cría, para tramitarle un crédito. Si no se corrigen esas desviaciones no se obtendrán resultados beneficiosos para los sectores se busca apoyar, igualmente debe existir agilidad en la concesión del crédito, pues aquello incide en costos del solicitante al tener que hacer sucesivos desplazamientos del campo a las oficinas del banco. Esta realidad también la viven pescadores artesanales y pequeños comerciantes o emprendedores autónomos que son beneficiarios del programa.

Se aspira que el monto de $ 1.000 millones ofrecidos para microcréditos sean efectivamente desembolsados proporcionalmente durante los 4 años de gobierno y se obtengan resultados positivos de esta plausible medida, que favorece a quienes contribuyen a la generación y circulación de riqueza en el país.