Se pisan la cola

La lista o rol de pagos tiene moros y cristianos, es decir que no se paga siguiendo el criterio de antigüedad, sino que, desde Quito, viene un listado en donde se indica a quiénes deberá pagarse. ¿Así funcionan los amarres?
Las deudas, la corrupción y las mafias han sido la génesis de la crisis del IESS, así como sus desaciertos administrativo-financieros y en adición a esto, el desbalance existente entre ingresos, egresos y obligaciones completan la agresión, adicionando el haber sido considerado por varios gobiernos como su caja chica, de la cual extrajeron con gran desparpajo, cuanto requerían para satisfacer sus apetitos nefastos.
Urge la reforma a la ley de la Seguridad Social que expulse al gobierno de su estructura, en virtud de que el IESS pertenece exclusivamente a derechohabientes y empleadores, y que sus fondos, intocables, serán utilizados únicamente para la satisfacción de las diferentes prestaciones contempladas en la ley.
En cuanto a pagos, hay una reacción en cadena frente a los acreedores: la recepcionista le pisa la cola a la secretaria, esta se la pisa al asistente que a su vez se la pisa al subjefe y este al jefe, es así que el trámite para llegar a la posición de pago ha sido víctima de una serie de pisotones, demoras y coimas en serie.
La lista o rol de pagos tiene moros y cristianos, es decir que no se paga siguiendo el criterio de antigüedad, sino que, desde Quito, viene un listado en donde se indica a quiénes deberá pagarse. ¿Así funcionan los amarres?
Un auditor que estuvo en la playa en el feriado me consultó por un problema de salud de un hijo y me contaba: “Tenemos la consigna de demorarnos en revisar los expedientes y castigarlos para retardar los pagos, y debemos en forma aleatoria, arrancar hojas de algún expediente para forzar a la institución a reponerlas con la rémora del caso. Por otra parte, el dinero para los pagos en Guayaquil está listo en Quito, pero no se lo transfiere para mantener ese estado de protesta de los prestadores y afectar la credibilidad y popularidad del gobierno de Lasso”.
¿Habrá llegado el momento de decir gracias a algunos de los presidentes del directorio, tramposos, coimadores, contratistas con sobreprecios, vende puestos, negociantes, traficantes de influencias para quienes: ¡el IESS les valió madre!
Y sigo andando…