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El León Becerra

Avatar del Luis Sarrazín

El hospital León Becerra, pese a todo, sigue laborando en silencio, soportando el quemeimportismo del Ministerio de Salud y el menosprecio total de las autoridades de turno. ¿El MSP asistirá a su entierro?

Causa repudio el contemplar a ciertas autoridades festejando sus éxitos y olvidando que todo cuanto hacen y harán es parte de su responsabilidad, y que por lo tanto, no ameritan aplauso ni reconocimiento alguno.

Lo que más irrita es que desde su torre de marfil no logran contemplar la miseria y deprivación en que viven cientos de miles de ecuatorianos que requieren de una verdadera y permanente atención.

El hospital León Becerra se afana en brindar salud en sus instalaciones, en donde existe un personal con una vocación increíble gracias al trío dinámico: Ricardo, Jorge y Modesto, quienes transmitieron el amor a la camiseta y gracias a una mística y especial convencimiento, laboran sin recibir la remuneración que les corresponde para satisfacer sus necesidades personales y familiares, con la esperanza de que “nos deben seis meses pero algún día nos pagarán”.

El IESS, el Issfa, el MSP y otras instituciones, desconsideradamente, envían pacientes al hospital León Becerra para que atiendan sus padecimientos, los cuales son devueltos una vez curados sus males y no tienen siquiera vergüenza al no cancelar los gastos que generaron los correspondientes servicios.

Las cirugías con la utilización de prótesis y ortesis se han suspendido al haberle cerrado el crédito al hospital por falta de pago de las que ya se utilizaron; ¿y el MSP? Bien gracias.

De una deuda de 13 millones, el vicepresidente Otto Sonnenholzner canceló seis y el resto se quedó en libros. Esos valores y los generados hasta el momento duermen el sueño del olvido y a las autoridades les importa un soberano rábano la suerte del hospital.

La gestión de las misiones que han venido del exterior ha sido fabulosa, persistiendo limitaciones como el haber cerrado una terapia intensiva de 5 camas por falta de personal. 139 pacientes afectos de cataratas fueron ya gratuitamente intervenidos.

El hospital León Becerra, pese a todo, sigue laborando en silencio, soportando el quemeimportismo del Ministerio de Salud y el menosprecio total de las autoridades de turno. ¿El MSP asistirá a su entierro?

Y sigo andando…