Joaquín Hernández: La incógnita de Ucrania

Ucrania vive la encrucijada de una Europa que la respalda, pero que no tiene la capacidad de ser garante
En estas semanas, Ucrania vive más que nunca en la oscuridad sobre su futuro. Su suerte parece estar atada a los golpes de las declaraciones del presidente Trump, pero, para ser honestos, esta debilidad está relacionada con la crisis de Europa como cultura y con el debilitamiento del modelo liberal propuesto como orden mundial en la década de los 90 del siglo pasado. Ante lo que significa la toma de Ucrania por Rusia, Europa está reaccionando, aunque no se sabe si con la rapidez que se requiere. En cuanto al fracaso del modelo liberal y las expectativas que generó, incluso en cuanto a la posibilidad de gozar de modos de vida diferentes gracias a la ciudadanía mundial y al libre mercado, podemos irnos despidiendo. Un mundo de bloques y de proteccionismo está rápidamente tomando su lugar y la sospecha de que la ley del más fuerte será la clave del orden mundial, con todas sus consecuencias, se va arraigando.
Ucrania vive en la encrucijada de una Europa que en términos generales la respalda, pero que no tiene, y no sabemos si alcanzará a tener, la capacidad de ser garante de su independencia. Ucrania necesita de EE.UU., pero sabe que la negociación con el gobierno de Trump es compleja. ¿Y si Washington estuviera interesado en terminar la guerra, no por desprecio a Zelenski o por adulación a Putin, sino porque no quiere distracciones en la competencia con su enemigo, que se llama China? Hasta hace poco la lectura de los acontecimientos parecía dar la razón a la tesis de que Trump se sentía identificado con Putin a tal punto que había hecho suya su teoría de la existencia de la Gran Madre Rusia y de la maldad secesionista de los ucranianos. Para que esta teoría funcione era necesario que nunca se haya producido ninguna invasión rusa a Ucrania. De lo contrario, sería admitir que China puede ocupar Taiwán tan pronto como quiera. Basta con armar un relato como el de Putin
Algunas luces en la oscuridad reafirman esta perspectiva, como las declaraciones de Mijailo Podolyak, asesor del presidente Zelenski para diario El País de Madrid. Él tiene como una de sus funciones definir la estrategia política de Ucrania para enfrentar la guerra con Rusia. En estos días, y tras la tormenta en la Oficina Oval entre Trump, Vance y Zelenski, el asesor señala en dicha entrevista que “la administración Trump, pese a todas sus declaraciones irónicas, ahora considera a Ucrania como sujeto. El destino de Ucrania parece diferente porque hoy es vista totalmente como un sujeto y no tiene nada que ver con Rusia”.