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Naturaleza, vida y propuesta

Avatar del Iván Baquerizo

"Podemos analizar nuestras vidas y la de los candidatos desde las mismas aristas; la naturaleza del hombre o su esencia; la trayectoria del hombre o su legado y su propuesta de vida o su mensaje"

Siendo Domingo de Resurrección mientras escribo estas palabras, reflexionaba acerca de la extraordinaria vida de Jesús de Nazaret. Hombre o Dios, su naturaleza humana fue maravillosa, independientemente se juzgue desde los ojos de la fe o del agnosticismo. Su vida, aunque corta, fue también ejemplo de integridad, amor y generosidad. Su mensaje, por último, fue tan potente que el cristianismo terminaría convirtiéndose en una de las religiones más populares del mundo. Divino o no, Jesús fue un hombre excepcional, mire desde donde se lo mire.

Sin pretender ni cercanamente divinizar a los seres humanos, se puede aterrizar el mismo análisis a un nivel más mundano. Podemos analizar nuestras vidas y la de los candidatos desde las mismas aristas; la naturaleza del hombre o su esencia; la trayectoria del hombre o su legado y su propuesta de vida o su mensaje. Estando necesariamente los políticos en el escrutinio público y siendo esta una columna de opinión, me voy a permitir hacer mi propio juicio de valor acerca de los candidatos ‘ad portas’ de las venideras elecciones; subjetivo sin duda, pero mío en definitiva.

Comenzando con el candidato Guillermo Lasso, considero que su naturaleza es la de un hombre capaz, incansablemente trabajador y serio. Se requiere de capacidad, principios sólidos y probidad notoria para lograr, empezando desde cero, emprender y administrar con éxito, porque en los negocios como en la vida, los piratas y los mediocres terminan fracasando a la larga. A nivel personal, para los que tenemos la suerte de conocerlo, Guillermo es un hombre bueno, generoso, creyente, que ha logrado formar una familia maravillosa. Su trayectoria de vida está a la vista de todos, un hombre exitoso en todo aquello que ha emprendido, a nivel personal, empresarial y comunitario. Por último, su propuesta política está basada en la libertad, la opción que ha llevado a las grandes naciones a generar prosperidad y trabajo para todos.

Pasando ahora al candidato Andrés Arauz, su naturaleza es la de un hombre ambicioso cuya característica principal es su baja credibilidad, producto de las reiteradas y comprobadas mentiras o verdades a medias que ha esgrimido durante su campaña. A nivel personal no lo conozco, ni tuviera por qué hacerlo, pero luce como un hombre poco deliberante, abyectamente leal a Rafael Correa. Su trayectoria de vida es mediocre, burócrata dorado prendido de la teta estatal por 12 años, de los cuales solo trabajó dos con intrascendentes resultados. Por último, su propuesta política es basada en el totalitarismo socialista; una opción política que históricamente solo ha significado miseria, indigencia y sometimiento.

Pocos conocen las espinas que rodean al sendero de la gloria. Este domingo 11 de abril tenemos la gravísima obligación de votar responsablemente por nuestras familias y nuestro país. Un voto que nos una y no que nos separe. Un voto que abandone las taras, los complejos y la demagogia, ya que el único camino está en el trabajo libre y responsable, porque ya va siendo hora de que finalmente tengamos la oportunidad de iniciar el anhelado camino al desarrollo. Que Dios ilumine al Ecuador este domingo.

¡Hasta la próxima!