Florencio Compte Guerrero: 100 años de un ídolo

En el Barrio del Astillero, un grupo de emigrantes catalanes y de guayaquileños fundaron el Barcelona Sporting Club...
Una de las manifestaciones de la modernidad, que surge de los cambios de la economía, el régimen del trabajo, la producción industrial y el crecimiento de las ciudades, es la experiencia de lo cotidiano. Algunas conquistas sociales en Ecuador, como un nuevo régimen laboral de ocho horas a partir de 1914, abrieron el espacio para que los ciudadanos pudieran disfrutar del tiempo libre que se expresó, entre otros, en la moda, en el cultivo de lo lúdico y en la práctica deportiva.
En la literatura significó el surgimiento de figuras como Hugo Mayo, atípica dentro de la vanguardia poética, quien fundó tres revistas literarias Síngulus en 1921, Proteo en 1922 y Motocicleta en 1924. Años más tarde, Demetrio Aguilera Malta, Joaquín Gallegos Lara, Enrique Gil Gilbert, José de la Cuadra y Alfredo Pareja Diezcanseco publicaron Los que se van, en que se releva la marginación de los grupos étnicos y sociales de la costa ecuatoriana enfrentados con lo urbano.
En lo deportivo, en la década de 1920 el fútbol se convirtió en un fenómeno social que concentraba a la mayor cantidad de espectadores. Ya para esas fechas era práctica común la celebración de competencias interprovinciales e internacionales en conmemoración de las fiestas de independencia de la ciudad, en la que participaban equipos que habían surgido en diferentes barrios y que empezaban a tener gran popularidad.
Fue en ese contexto de prosperidad económica y de cambios sociales que hoy, hace 100 años, en casa del catalán Eutimio Pérez Arumi, en el Barrio del Astillero, un grupo de emigrantes catalanes y de guayaquileños fundaron el Barcelona Sporting Club que, con los años, se convirtió en el club de fútbol más importante y popular del país.
Ese mismo año, el 9 de julio, en Quito, un grupo de militares progresistas, apoyados por la clase media, derrocaron a la coalición de liberales y de burgueses comerciales-financieros y estableció reformas modernizadoras de fortalecimiento y reorganización técnica del Estado, algunas de carácter fiscal y otras de tipo social, que en general permitieron sentar las bases del Ecuador moderno.