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Datos poselectorales

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"Si la buena estrella sigue acompañando al sector correísta es posible que el actual proceso electoral concluya con su triunfo"

Sin embargo de que Andrés Arauz era un personaje absolutamente desconocido en el escenario de la política nacional, fue él quien salió triunfador, listo para entrar a la segunda vuelta en el mes de abril, en las elecciones presidenciales que se realizaron el pasado 7 de febrero. ¿Cómo explicar esta sorpresa? Pues con el hecho de que el electorado que lo favoreció con su voto sufragó, indirectamente, a favor del expresidente Correa. Aquí viene la otra sorpresa y paradoja. Y es que sin embargo de que la justicia por el caso de los sobornos conocido inicialmente como Arroz Verde” lo condenó, encabezando una lista de procesados, a ocho años de prisión y quitándole el derecho a ocupar cualquier cargo público en el futuro, esta condena no lo satanizó sino que, por el contrario, lo convirtió en una suerte de víctima por lo que buena parte del pueblo, condolido, lo consoló con el voto a favor de su partido.

¿Y a qué se debe, además, esta popularidad del exmandatario? Sencillamente se recuerdan las obras que se llevaron a cabo durante su gobierno gracias a la bonanza petrolera, con un barril de crudo que se cotizó a más de $ 100 en el mercado internacional, situación nunca antes vista en el pasado.

No obstante, otra parte de la ciudadanía que no comulga con tal simpatía a favor de quien sigue prófugo y exiliado en Bélgica, recuerda que gracias a los grandes ingresos que tuvo el Estado durante la década correísta, también se produjo una misteriosa desaparición de fondos públicos, por ejemplo, en el caso de las refinerías del Pacífico (que nunca se construyó) y la de Esmeraldas, en la que se invirtieron miles de millones de dólares para que quede “papelito” y sin embargo sigue con las mismas fallas de siempre. Como dice el viejo adagio: “en arca abierta el justo peca”.

Si la buena estrella sigue acompañando al sector correísta es posible que el actual proceso electoral concluya con su triunfo, con lo cual pese a que la justicia trate de hacer cumplir sus condenas, el prófugo volvería al país protegido por el nuevo gobierno para ocupar una función pública, como ya lo ha prometido el propio Arauz. Y hasta es posible que se inicie una campaña para volverlo a instalar en Carondelet luego de los comicios del 2025.