Premium

Independencia judicial

Avatar del Byron López

La ciudadanía se pregunta con angustia ¿por qué en el Ecuador nada puede hacerse con transparencia y con apego a la ley, a la moral y a la ética?.

La ciudadanía se pregunta con angustia ¿por qué en el Ecuador nada puede hacerse con transparencia y con apego a la ley , a la moral y a la ética ? Esta pregunta que nunca tiene una respuesta coherente por parte de los organismos públicos se la formula en estos momentos en los que se encuentra en marcha el concurso para la designación de los nuevos jueces de la Corte Nacional de Justicia, por parte del Consejo de la Judicatura.

Existe un clamor general en cuanto a la seriedad y a la rectitud con la que debe ser manejado este asunto que se vincula con una de las funciones más respetables del estado, como es la judicial.

La Comisión Nacional Anticorrupción públicamente expresó que este concurso adolecía de múltiples fallas técnicas y de procedimiento, razón por la cual se retiró de continuar siendo veedora del mismo. Posteriormente, uno de los miembros del Consejo de la Judicatura se separó de este organismo con el argumento de que el concurso adolecía de vicios que podían crear la nulidad del proceso o que se dijera que fue llevado a cabo con fines de otra naturaleza que no fueran los de integrar una Corte Nacional con juristas de primera línea, capaces, probos y libres de cualquier influencia del poder político, acostumbrado a “meter las manos en la justicia” para poder manejarla de acuerdo con sus intereses protervos .

Algunos participantes en este concurso también han manifestado su protesta en relación con el trámite dado a este evento. Y algunos de ellos presentaron sus “renuncias” para seguir interviniendo dentro del mismo.

Hay asambleístas de diversas “bancadas”, quienes han expresado su criterio en el sentido de que este concurso se suspenda y dicen que van a llamar a la Asamblea para investigar a los miembros del Consejo de la Judicatura.

No puede ser que se continúe con este proceso “por encima de los muertos”, porque la justicia no puede ser manejada así.

En este caso caso debe adoptarse una actitud firme: superar todos las irregularidades, o convocar un nuevo concurso. “That is the question”.