Sobre jubilados de la Universidad de Guayaquil

Estoy dolida por el trato que dan a los jubilados en la Universidad de Guayaquil. Laboré como docente más de 34 años; en 2017 fue aceptado mi trámite de jubilación pero hasta la fecha no he recibido la compensación económica que por ley me corresponde. Estos tres años han sido un verdadero peregrinaje. Me citaban para un mes, luego para dos, para tres, y así pasó el tiempo. Las excusas eran que la persona indicada para este trámite estaba muy ocupada, que está de vacaciones, que está con descanso médico; por último que fue reemplazada por otro empleado. Este último dijo que tenía que revisar bien y que venga en otra fecha. A la final me supo manifestar que la documentación estaba completa, lista para ser pagada, pero que tenga paciencia porque no hay plata. El caso es que hubo otros compañeros y compañeras que se retiraron igual y hasta después que yo, y en poco tiempo cobraron sus compensaciones.  

Nivia Pinos Paredes