Cuestión de empanaditas

En días pasados cumplió años el Sr. Fernando Villavicencio, asambleísta cumplidor de su deber en la Comisión Fiscalizadora, devengado su salario en buena forma. Lo felicité por medio de redes sociales y añadí en son de broma: “ojalá no nos pasen (al pueblo) en la factura el valor de las empanaditas de $ 6 que consumió la Sra. Presidenta de la Asamblea en un hotel de tantas estrellas. Ojalá el asunto no haya sido guardado en el archivo del olvido, como es costumbre, pues las funciones del CAL son las de receptor y clasificador para dirigirlos al Pleno, máxima autoridad, y continuar con el debido proceso. Pongo esto en manos del Sr. Villavicencio para que le dé cabida en su agenda.