Cartas de lectores: Francamente penoso
No puede considerarse seria la alegación de dogmáticos alineados y alienados por el fanatismo
No hay nada más decepcionante y penoso para un pueblo que constatar que quien alguna vez dirigió los destinos de su país es una persona con muy poca capacidad de razonamiento, que se aferra a dogmas y encarna berrinches infantiles.
Es repetitivo que el expresidente Correa y su ex candidata presidencial, Luisa González, mencionen el tema de la tinta transferible luego que ellos mismos reconocieran que el reclamo no tenía futuro. Han sostenido que se basan en el informe de observadores de la OEA. Si esto es cierto y la delegación de la OEA lo considera válido y contundente, ¿por qué esta no pidió la nulidad de las elecciones?
Ni siquiera aliados como RETO o Pachakutik han salido en defensa de tan absurda pretensión. Hasta donde conozco, la delegación de la OEA, tras la alharaca que hicieron Correa y Luisa, dijo que lo que ellos observaron, en casos aislados, fueron manchas de tinta en algunas papeletas, lo que lógicamente no constituye prueba alguna de fraude.
Tampoco hemos visto inconformidad en la porción de la población que votó por Luisa González, que tampoco es que sea poca, ni pronunciamientos serios contra los resultados. No puede considerarse seria la alegación de dogmáticos alineados y alienados por el fanatismo, que no pasan de cuatro mandatarios claramente identificados como apoyadores del totalitarismo y visiblemente dogmáticos. Afortunadamente no caímos en la sabia sentencia de Gandhi: “Si hay un idiota en el poder es porque quienes lo eligieron están bien representados”.
José M. Jalil Haas