Cartas de lectores | Fiestas guayaquileñas: un menú en cadenas
Todo lo que se hace en esta vida, se paga; algunos lo llaman karma, otros justicia divina
En las fiestas guayaquileñas nunca falta la sazón, y la salsa picante guayaca que ponemos en las caricaturas y parodias plasmadas con el látigo de la tinta indeleble en las páginas de la vida cotidiana, entre risas, metáforas y tertulias cafeteras. En el menú tenemos una combustión de chuletas inflamables a la parrilla, con ají con mote en salsa de chimichurri, y de postre unos ricos helados en la calle Alcedo, y luego una ‘ruca’. Aquí les dejo un ‘souvenir’ para recordarlo siempre, un pito para celebrar la paz y no la guerra, una banda musical con el tema de Frank Sinatra, ‘New York, New York’, y un encuentro de festival entre bandas musicales, con un corazón grande de emociones festivas, depurando el estómago de tanta basura alimenticia, y purgando para expulsar esa metástasis dañina para nuestro cuerpo y mente. Un viejo adagio popular dice: niño malcriado encuentra padre y madre en la calle, y le pueden dar un mal golpe justo en el talón de Aquiles, que tendrían que entablillar urgente e ir al hospital. Todo lo que se hace en esta vida, se paga; algunos lo llaman karma, otros justicia divina. ¿Quién sigue después? Viva Guayaquil, car…
Javier Valarezo Serrano