Cartas de lectores | Educación, economía, seguridad y salud

Considero que, más allá de criterios políticos que suelen ser nefastos, el país requiere unir esfuerzos

Los principales problemas del país son la educación, la crisis económica, la inseguridad y la salud, entre otros de larga data que se resuelven con el tiempo.

Me referiré a ellos desde mi visión de ciudadano preocupado y alejado de posturas políticas que suelen restar más que sumar.

La educación en todos los niveles es el pilar fundamental de la sociedad. Se requieren políticas de Estado que trasciendan al administrador de turno y privilegien una formación integral que permita a los ciudadanos aprender a conocer, a hacer y a ser útiles a la sociedad; lo demás viene por añadidura.

La inseguridad está marcada por el incremento de la violencia impulsada por el narcotráfico transnacional, que se aprovecha de la pobreza, el desempleo y, en ciertos casos, del contubernio estatal. El Estado no enfrenta con firmeza la realidad por falta de un marco legal que proteja a los ciudadanos de bien. En este contexto, considero que las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional cumplen un papel extraordinario, valorado y respetado por la mayoría de la población.

La economía muestra un proceso de crecimiento perceptible en el aumento de exportaciones no petroleras, ventas locales y reactivación de la construcción inmobiliaria, uno de los principales generadores de empleo. Sin embargo, aún falta mucho para superar la crisis.

En salud, cada día se denuncian actos de corrupción en numerosos hospitales: filtración de medicinas, daños frecuentes en equipos y otras prácticas que perjudican a la población. Actualmente, la vicepresidenta se ha hecho cargo del sector, decisión que se aplaude, aunque algunos sectores políticos critican su capacidad por no ser profesional de la salud. Sin embargo, los anteriores responsables sí lo eran, y los resultados están a la vista. Lo que se necesita es un buen administrador con visión, responsabilidad y honradez para desarticular las mafias internas y resolver el problema.

Considero que, más allá de criterios políticos que suelen ser nefastos, el país requiere unir esfuerzos para salir de esta crisis.

Jacinto Rivero Solórzano