La Asamblea manipuló a su antojo la
Constitución y las leyes

Es momento que las fuerzas vivas unan esfuerzos para reorganizar el país, proclive a desaparecer antes que el loco de Rusia nos aniquile a todos

Se supone que la Asamblea está integrada por personas dedicadas a la política para servir a su pueblo y no para servirse de él. ¿Cómo es posible que agrupados como en gallada para atacar otro barrio, como se estila en las calles de la mayoría de ciudades, robando y asesinando ciudadanos honestos, manipulen a su antojo las voluntades con el fin de salvar del castigo a personas que, con soberbia, sometieron a trifulcas desenfrenadas a Quito en octubre de 2019, manteniendo en vilo al país, destruyendo edificios, aceras, calles, secuestrando periodistas; los capitalinos trabajadores debieron cerrar sus negocios para no ser destruidos y torturados. El edificio de Contraloría, donde existían documentos para comprobar delitos, fue destruido con ellos para desaparecer evidencias. Por la prepotencia de dirigentes indígenas y por decisión de dirigentes políticos y funcionarios públicos que querían derrocar al presidente Moreno, incendiaron la capital. Según entendidos en finanzas el país perdió un aproximado de $ 800 millones y Quito unos $ 200 millones. Lo censurable es que el 10 de marzo, la Asamblea con 99 votos de malos ciudadanos aprobaron amnistía para 268 personas que quedarán perdonados de toda culpa, haciendo gala de que en este país mandan los malos, ejemplos negativos para niños y jóvenes. Los problemas de octubre se borraron por arte de magia, burlándose de los honestos. Esta página negra se une a los ataques de narcotraficantes, delincuentes, asesinos. Es momento que las fuerzas vivas unan esfuerzos para reorganizar el país, proclive a desaparecer antes que el loco de Rusia nos aniquile a todos.

Arq. Rodolfo López Osorio