Violinista
Personaje. Lucía Sánchez, una de las primeras mujeres de la Orquesta Sinfónica de Guayaquil. En la actualidad tiene 99 años de edad.Miguel Canales Leon

Los 99 años de un legado musical

Lucía Sánchez me ha inspirado a luchar, a no rendirme. Para promover la música creé el festival internacional de Flautistas Perla del Pacífico.

Sus manos bailan sobre las cuerdas del violín sin delatar que tiene 99 años de edad. Lucía Sánchez es una de las primeras mujeres que fue parte de la Orquesta Sinfónica de Guayaquil. Sorprende que a pesar del tiempo que ha pasado desde que nació en Carchi, el 3 de abril de 1923, ella no usa lentes para leer una partitura, un libro o el periódico.

conservatorio 1

No hay espacio para la música en Guayaquil

Leer más

En la entrevista deleita los oídos y el corazón con melodías de pasillos y de tangos. Entre acordes pausa con una amplia sonrisa y picardía para decir que su instrumento musical es menor que ella con dos años, fue construido en 1925 en Alemania y suena mejor con los años.

“Mire, estamos jóvenes y seguimos siendo la pareja ideal”, bromea y con emoción señala que solo faltan seis meses para que ella cumpla los 100 años de edad.

Relata que se enamoró de la música cuando tenía seis años. Vivía en Loja cuando escuchó tocar a Hidalgo, hermano de la primera doctora del país Matilde Hidalgo de Procel. Entonces se propuso ser violinista y con tesón llegó a esta meta.

Su familia migró a Cuenca, todavía recuerda que el viaje fue a lomo de mula y se necesitaron siete días para llegar al destino y es en esta ciudad donde empezó a estudiar el instrumento musical con José Ignacio Romero.

Después migró a Guayaquil, para ese entonces era una joven y aquí siguió sus estudios de música que la llevaron a formar parte del grupo musical que luego sería la Orquesta Sinfónica de Guayaquil.

Violinista
Arte. Rubén Manrique junto a su hija Carlota (derecha), su nieta, Paola y ex alumnas del Colegio Guayaquil.CARLOS KLINGER

Sánchez cuenta que la Orquesta fue reconocida como tal en 1950, antes había un grupo pequeño (23) que pagaba el Municipio. En ese entonces las presentaciones eran en la pérgola del parque que queda frente a la catedral de la ciudad.

LUTHERISMO EN GUAYAQUI (9055519)

El arte de curar la música, vivo ante cualquier pronóstico

Leer más

En la actualidad la Orquesta tiene 72 años, “es más joven que yo”, se ríe Sánchez.

Lucía Sánchez es una de las fundadoras de la Orquesta Sinfónica de Guayaquil. Otro ejemplo de entrega es la familia Manrique. Ambos inspiran otras propuestas de arte.

Leonardo León, maestro concertista

Son cientos de conciertos en los que participó, no los tiene cuantificados, pero ella piensa igual que el director de orquestas español, Íñigo Pirfano, de que deben existir más jóvenes con instrumentos musicales y alejados de la violencia.

“Me duele ver la inseguridad que hay en Guayaquil y en otras ciudades del país, una solución es que los niños escuchen la buena música, la que insta a hacer buenas obras. Aspiro a que haya más jóvenes con un instrumento musical en la mano, que con una pistola”, manifiesta.

El legado musical de Lucía que enaltece a Guayaquil no es único. Otro ejemplo es la familia Manrique Suárez, son tres generaciones que han aprendido a tocar violín y piano. Rubén Manrique, de 84 años de edad, también fue miembro fundador de la Orquesta Sinfónica de Guayaquil, y fue quien consiguió que el grupo no tenga que pelear el financiamiento con el zoológico que la Casa de Cultura tenía entre las décadas 50 y 60. Logró la independencia de la entidad musical en 1970.

El amor y cariño con el que Lucía emprendía día a día su jornada musical es un ejemplo a seguir, así como promover la música en las nuevas generaciones.

Cindy Camchong, maestra concertista

Entre las nuevas generaciones que triunfan están los hijos de Manrique: Carlota, Paola y Rubén. Las dos son concertistas. Paola ha llevado el nombre de Ecuador al exterior, fue becada en Estados Unidos en la Universidad de Louisville. Ahora dirige el programa de música en la escuela de Bardstown.

Los nietos de Manrique también son músicos.

En el mundo musical los apellidos Sánchez y Manrique son sellos de la historia musical instrumental de Guayaquil. Son la historia viviente del arte que se destaca en la urbe.

  • Los frutos de una inspiración

Los ejemplos de la entrega artística a la música de Lucía Sánchez y de la familia Manrique Suárez inspiran otras propuestas, por ejemplo la Fundación Música sin Fronteras, dirigida por Cindy Camchong. Aquí hay 50 violines y violonchelos para que estudien niños entre 6 y 12 años. “De esta manera promuevo la música en las nuevas generaciones, es una necesidad hacerlo como dice Lucía”, dijo Camchong.

Otra iniciativa es la promovida por Leonardo León, lleva ocho años realizando el Festival Internacional de Flautistas Perla del Pacífico y de aquí salió el proyecto Vientos de los Hemisferios, donde participan otros músicos inspirados en el ejemplo de Sánchez y Manrique. En este grupo y en la Orquesta Sinfónica de Guayaquil está Minerva Quintana, alumna de Rubén Manrique y admiradora del legado musical de Lucía.