Deportistas ecuatorianos, empresa privada, apoyo, Fundación Crisfe
Una parte de los deportistas que forman parte del Team Crisfe y que reciben un apoyo integral de parte de la fundación.GUSTAVO GUAMÁN / EXPRESO

La empresa privada, un ‘salvavidas’ para los deportistas ecuatorianos

Con la reducción de recursos del Estado desde 2015, el apoyo privado ha sido clave para los representantes tricolores

El presupuesto para el deporte en Ecuador ha ido disminuyendo desde el 2015. Una década que coincide con el abandono de los Centros de Entrenamiento para el Alto Rendimiento, pero en la que, sin embargo, se han conseguido resultados soñados para el país, con dos oros olímpicos en Tokio 2020+1 y cinco medallas más en París 2024.

Te invitamos a leer: Challenger de Guayaquil 2025: dónde ver, premios y representación ecuatoriana

Ante esto, surge la duda de cómo a pesar de que el deporte dejó de ser un asunto prioritario para los últimos Gobiernos, los logros hablan de un alto nivel competitivo. La respuesta está en la empresa privada, rubro que ha sido el sostén de varios deportistas.

Richard Carapaz fue el primero en evidenciar esta situación cuando, al conseguir el oro olímpico en Tokio 2020+1, aseguró que el triunfo era suyo porque el país no le había entregado nada. Contó con todo el contingente de su equipo de entonces, el Ineos, y auspicios de la empresa privada.

Uno de los programas privados que han permitido el crecimiento del deporte es el de la Fundación Crisfe, que cuenta con un proyecto integral de fomento deportivo y entrega recursos de manera directa según un escalafón.

Un deportista con proyección puede recibir desde 10.000 dólares anuales, monto que se va incrementando según sus logros. Se trata de una cifra que es imposible en el Plan de Alto Rendimiento para un atleta en la misma etapa.

Crisfe entrega recursos de manera directa a 26 deportistas de élite, como Glenda Morejón, Daniel Pintado, Anahí Suárez, Martín López, Mateo Ramírez, entre otros.

A pesar de que no existe otro programa igual a nivel privado, sí destacan marcas que cada vez más respaldan a deportistas con auspicios directos y acaban cubriendo gastos que no puede afrontar el Estado, evidenciando que el alcance del Plan de Alto Rendimiento es insuficiente, sobre todo porque no cuenta con la adecuada infraestructura deportiva.

Crisis de infraestructura

CEAR Macas
La única ciudad del oriente escogida para levantar dos centros de este tipo guarda implementos obsoletos.Mishell Duque / Expreso

La falta de escenarios aptos para la élite deportiva genera los mayores gastos para un deportista. Todos requieren salir del país a lugares que cuenten con instalaciones e implementos actualizados y donde coincidan con sus pares internacionales, en su objetivo de mejorar.

Una base de entrenamiento de un deportista de élite puede costar desde 3.000 dólares, según comenta Esteban Palacios, de la agencia de representación Big Events.

Esos montos podrían reducirse si el país lograra rehabilitar al menos uno de los cinco CEAR. Pero lo cierto es que la última vez que uno de estos estuvo medio funcional fue antes de Tokio 2020+1, cuando Neisi Dajomes y Angie Palacios se concentraron allí.

Y no fue porque allí tuvieran todo lo necesario, sino porque su entrenador quería tenerlas aisladas de cualquier distracción. Fue en Carpuela y ya entonces reinaba el abandono.

A pesar de la medalla olímpica que consiguió, Ecuador continuo sin renovar sus gimnasios de pesas, tanto que la Universidad San Francisco de Quito tuvo que construir uno para que Neisi y sus hermanos pudieran entrenar en el siguiente ciclo olímpico.

El apoyo privado es clave

carapaz
Richard Carapaz criticó la falta de apoyo para la cita de Tokio 2020+1.ARCHIVO

Hay casos que demuestran el éxito del trabajo conjunto de las marcas con deportistas, como el de David Hurtado. El marchista es imagen de al menos seis empresas, a las que entrega frecuentemente contenido en redes y en cada competencia.

En el último Mundial, él fue uno de los pocos que pudieron realizar una base de entrenamiento en Europa, llegar con anticipación a Japón y tener todos los implementos, mientras el ahora Viceministerio del Deporte tenía retrasados los recursos a la Federación de Atletismo para ese evento.

Para seguir leyendo EXPRESO sin restricciones, ¡SUSCRÍBETE AQUÍ!