Premium

Jannina Cabal, arquitecta
Sui primer trabajo fue a los 18 años, en una empresa eléctrica haciendo planos de circuitos..Cortesía

Jannina Cabal, el éxito detrás de la mujer

Ejemplo para las jóvenes arquitectas, la guayaquileña se impone con sus diseños constructivos con un espíritu férreo e innovador 

En una carrera donde los hombres han sido protagonistas por historia, Jannina ha logrado importantes conquistas en el diseño urbanístico de la ciudad de Guayaquil, donde sus proyectos se destacan con su inefable impronta.

Descifrar su trayectoria resulta un compendio ordenado de hechos que fueron ubicándola acertadamente entre los mejores del país. Sin ‘padrinazgos’, fue construyendo sólidamente una carrera que, hoy por hoy, disfruta con un bien merecido reconocimiento. Cumplidos los 44, sus diseños han sido publicados en diferentes medios, donde se remarcan sus logros arquitectónicos.

Rumbo fijo

Desde pequeña amaba dibujar... Recuerdo que a los 5 años tuve que dibujar en el pizarrón una tarea del cuaderno, porque la profesora pensó que lo habían hecho mis papás, pero cuando vio que yo misma lo había hecho, no lo podía creer. Saqué mi 20”.

Con talento natural, pensó estudiar diseño gráfico, pero un test de aptitudes reveló su capacidad en arquitectura. “Mi madre me lo había sugerido, pero, joven como era, no escuché... No conocía mucho de esta carrera, a pesar de que mi papá es ingeniero civil, pero a partir de entonces entendí todas las ramas que se podían derivar de la arquitectura en relación al diseño y decidí estudiar arquitectura. Y aquí estoy ahora ¡feliz!”.

Ambiciosa y muy trabajadora, empezó su recorrido profesional a la par de sus estudios universitarios en su natal ciudad. Sin miedo a los desafíos, su incursión por la arquitectura fue expandiéndose poco a poco en diferentes plazas, siempre con el ánimo de seguir aprendiendo y sumando experiencias: “Mi primer trabajo fue a los 18 años, en una empresa eléctrica haciendo planos de circuitos; luego estuve en una consultora dibujando planos estructurales y en constructoras, inmobilarias y estudios de arquitectos conocidos”. Jannina dibujaba, hacía maquetas, perspectivas... y aunque afirmaba que sabía hacer de todo, iba aprendiendo en el camino, y lo hacía de maravilla.

Hasta que una promotora inmobiliaria le dio la oportunidad de diseñar casas, cuando aún era estudiante. Con ese ímpetu y el título en brazos, una decoradora del medio -a quien dibujaba sus proyectos- le pidió que haga su casa y fue un hit. La obra fue publicada y desde entonces el rumbo dio un giro: “¡Así empezó todo! Luego vino una urbanización, un constructor me pidió que le diseñe sus casas, y etc., etc... ¡Y sigo adelante..!”.

Positiva, optimista y apasionada en lo que hace, siente que a veces la fantasía la supera, pero eso, afirma, es un punto a favor en su carrera: “No veo los fracasos sino las enseñanzas que me empujan a ser mejor y seguir aprendiendo”.

Al mismo tiempo, considera que su profesión exige actualizarse constantemente, innovar y no olvidar la esencia del diseño: “Son cosas que aplico en mis proyectos; además, no oigo a quienes me contratan, sino que los escucho, los siento y los vivo. Me involucro tanto que, a veces, creo que ¡yo soy el cliente! Amo lo que hago y creo que eso le transmito a mis clientes, por eso confían en mi trabajo”.

Creo que es mejor ver lo bueno de este momento: he valorado más mi familia y mi casa, el tiempo con ellos lo he disfrutado el 100 por ciento. Antes de la pandemia éramos como máquinas, siento que el tiempo se detuvo para que reflexionemos y aprendamos”.

Jannina Cabal, arquitecta
Jannina Cabal, arquitectaCortesía

Rompiendo paradigmas

Siendo mujer, el desafío de destacar en el sector de la construcción fue mayor. Sin embargo, su más alta motivación fueron sus tres hijos varones (de 14, 15 y 19 años ): “Eso me dio un empuje bárbaro para que ellos vean que una mujer puede ser, además de mamá, una buena profesional. Me acompañan en esta aventura y saben todos los esfuerzos que he hecho y sigo haciendo por sacarlos adelante siempre. Son mi orgullo”.

Con la mirada hacia adelante, segura de sí misma, constante en sus metas y apoyada en el resultado de su trabajo, creó su propia firma: “Me enorgullece ser mujer y creo que la sociedad ha ido cambiando. Ahora, la mayoría de estudiantes de arquitectura son mujeres. Muchas me ven como ejemplo a seguir y me piden consejos. Yo les digo que confíen, con amor y pasión..., y que si caen, vuelvan a levantarse con el doble de energía para dar su 200 por ciento”.

Las cosas no se dan de un día para otro, dice. “Han pasado 20 años y he crecido en todo sentido, pero aún tengo mucho por aprender, dar y crear. Trabajo con la misma energía y emoción del día en que hice mi primer diseño. Cada proyecto es un desafío y si algo es más complicado me encanta ¡porque me pico! (risas)”.

Cara a cara

¿Qué le hace falta ahora mismo?

Lo tengo todo. Estamos vivos y sanos, y con eso no pido más.

¿Qué le falta por vivir?

¡Viajar! Conocer el mundo entero, sus culturas y comida.

¿Qué es lo que más le gusta en la vida?

Sonreír.

 ¿Sus caprichos?

Soy intensa en lo que quiero.

¿Su meta más cercana?

Proyectos Internacionales y otro libro.

 ¿Qué está construyendo ahora?

Estoy desarrollando un proyecto en Brasil.

¿Cómo es la casa de Jannina, siendo una de las mejores arquitectas del país?

Amoooooo mi casa. Yo creo que el que me conoce sabe que la casa soy yo: lo dice todo, es muy sensorial porque está muy conectada con el exterior. Viviría aquí muchos años más. La hemos disfrutado en la pandemia más de lo que imaginé, porque la he vivido al 100 por ciento, ¡hasta he usado la cocina que jamás pensé la iba a tocar!

 ¿Cuáles considera son los éxitos en su vida?

Mis hijos. Son buenísimos, independientes y jamás me han dado problemas.

Detalles

  • Talentosa y guapa, su estilo es como su personalidad: alegre.

  • Las piezas infaltables en su ropero son sus sneackers y una buena cartera.

  • Sus rutinas de belleza imperdonables: hacer ejercicio desde que cumplió 40 y cuidar la piel con buenos productos.
Jannina Cabal, arquitecta
Jannina Cabal, arquitectaCortesía

Personal

  • Edad: 44 años.

  • Estudios: Universidad Católica de Santiago de Guayaquil.

  •  Libro: Jannina Cabal & Arquitectos.

  •  Casada y madre de 3 hijos.