Desde la infancia es prioritario inculcar en los hijos, buenas costumbres que vayan a repercutir de manera fructífera en su salud física, mental y emocional. Y, según los especialistas, las mamás son las principales educadoras del hogar y quienes deben implementar y fomentar hábitos saludables en las rutinas diarias de los más pequeños. De allí la importancia de que mamá y papá prediquen en casa con el ejemplo.

ALIMENTACIÓN SANA

Un niño que come de manera equilibrada con seguridad tendrá una vida saludable, lejos de enfermedades como la obesidad infantil que crece a pasos agigantados y que en el 2032 afectará a casi 400 millones de niños, sgún la OMS. Además, estará lejos de trastornos cardiovasculares, diabetes y cáncer.

Por eso, los pequeños siempre deben desayunar porque esta es la comida más importante del día e incluir cereales, fruta y algún producto lácteo. Y llevar a la escuela, loncheras variadas y nutritivas.

Es prioritario aumentar el consumo de frutas y verduras, legumbres, cereales integrales, proteínas y frutos secos, seleccionando al agua como bebida principal.

ACTIVIDAD FÍSICA

El niño que hace ejercicio físico de forma regular, mínimo 60 minutos la mayoría de los días de la semana, tiene más probabilidades de llevar una vida sana y un mejor desarrollo físico.

Es importante reducir el número de horas que pasa delante de la televisión, videojuegos o computador, y destinar un horario para estas actividades que no exceda las 2 horas al día.

Lo que sí debe hacer es jugar, esta actividad lo ayuda a desarrollarse y adquirir nuevas habilidades. Además, de mejorar sus capacidades cognitivas y relaciones sociales.

DORMIR

El cuerpo necesita descansar para reponerse del trajín del día. Establezca a su hijo un horario para irse a dormir y verifique que lo resprete. Dependiendo de la edad, entre 8 y 10 horas de sueño son suficientes.

Antes de ir a dormir evitar actividades que le estimulen. El dormitorio debe ser un lugar tranquilo sin ruido ni excesiva luz.

BEBER AGUA

Beber agua es necesario para eliminar toxinas e hidratar todos los órganos del cuerpo. El agua debe ser la bebida principal de toda la familia en cada comida.

En el caso de los niños entre 11 y 18 años, de 2 litros diarios (de 6 a 8 vasos).

ENSÉÑELES A SOCIALIZAR

La socialización o relacionarse con los demás los motiva a interactuar con otros niños y personas así como a compartir recursos y conocimientos. Al compartir empiezan a comprender el concepto del otro, que alimenta su pensamiento creativo y lógico ahora y en las etapas subsecuentes.

Además, compartir y socializar ayuda a los niños a hacer amigos, y la amistad es un elemento básico de su bienestar emocional y mental.

HIGIENE DENTAL

Mantener los dientes limpios es una prioriadad. Incúlqueles el hábito de cepillarlos después de cada comida, así mantendrán alejadas de su boca a caries, halitosis y otras enfermedades.

MANOS LIMPIAS

Las manos limpias reducen hasta el 50% el riesgo de contraer enfermedades como resfriados, gripes, Covid y otras infecciones como las gastrointestinales.

Enséñeles a lavarse las manos después de jugar, antes y  después de comer, cuando van al baño o tocan a un animal.

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