Las emociones que despierta el cambio de año son variadas. Desde nostalgia hasta alegría y felicidad. Y justamente estas dos últimas son las que hay que aprovechar en familia, especialmente con los pequeños de la casa. Cocinar con ellos trae consigo beneficios para su desarrollo, dice la nutricionista Susan Bowerman, quien detalla 7 aspectos principales que acompañan esta experiencia:

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1. Impulsar el aprecio por alimentos saludables: Los padres deben educar con el ejemplo, para que sus hijos los imiten. Preparar menús adecuados para las cenas con amigos, familia y seres queridos puede ser divertido para ellos, además les ayuda a los niños a apreciar los alimentos saludables.
2. Animar a los niños a probar nuevos alimentos: En estas festividades se preparan platos especiales con ingredientes diferentes a los que se usan en el día a día. Aprovecha esta oportunidad para que los niños degusten sabores y texturas distintas. Cuando ellos se involucran en esta novedosa experiencia van a tener la predisposición de probar alimentos nuevos.
3. Aumentar la autoestima: Cuando un niño cocina, ama presumir que él lo hizo, y esta acción también aumenta su autoestima. Guía y ayúdalos a preparar recetas apropiadas para su edad.
4. Aprovechar su creatividad: Una vez que el menor desarrolle algunas habilidades fundamentales y aprenda a seguir las instrucciones de las recetas, anímalos a ser creativos. Puedes empezar con una receta básica y sencilla. Así crearán su propio recetari.
5. Fomentar los lazos familiares: El tiempo que pasan juntos suele ser relajante tanto para el adulto como para el niño. Aproveche para explicarle lo rica y saludable que será la comida.
6. Mejorar las habilidades motrices: Cuando ellos se involucren en actividades como agitar, mezclar ingredientes, amasar o, si son niños más grandes, picar vegetales es magnífico para mejorar su fuerza motriz, control y coordinación mano-ojo. 
7. Aumentar la concentración y la atención: Cuando se cocina hay que seguir instrucciones y pasos de forma correcta para lograr un producto final delicioso. Los niños aprenden a darle valor a cada detalle. Y entienbden que si quieren comer ese bocadillo deben concentrarse.

Al planificar las cenas festivas, incluye a los pequeños en la elección de recetas adecuadas para su edad y habilidades. "Preparar juntos estas comidas especiales no solo crea momentos memorables sino también habilidades que perdurarán toda la vida", dice Susan Bowerman, directora de nutrición de Herbalife.

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