Vive el nino abandonado como castigo

Una de las búsquedas más angustiosas que recuerda Japón tuvo un imprevisto final feliz. Yamato Tanooka, el niño de siete años abandonado hace seis días por sus padres en una zona boscosa de la isla de Hokaido, habitada por osos, fue hallado ayer vivo y en buen estado físico por militares.

Yamato se había refugiado en un hangar del Ejército ubicado a unos 5 km del punto en el que desapareció. En el lugar no había electricidad ni comida, aunque sí un grifo del que pudo beber agua. Soportó temperaturas de 5 grados abrigándose entre dos colchones. Estaba hambriento y le dieron un par de bolas de arroz.

El caso ha abierto el debate en torno a las rígidas normas de educación en la sociedad nipona. En las redes sociales se intercalaron mensajes de alivio, alegría y críticas a los padres de Yamato. Estos sostuvieron que tras dejarlo como castigo por su mal comportamiento, volvieron minutos después, pero ya no estaba. Apenados, pidieron perdón a la sociedad japonesa y a su hijo. EFE