El proceso de Visto Bueno, que permite la terminación del contrato laboral previa aprobación de la autoridad laboral competente, no es exclusivo de los empleadores para con sus trabajadores. Según el artículo 173 del Código de Trabajo, los empleados también tienen la facultad de solicitar este trámite en ciertas circunstancias.

Existen varias razones por las cuales un empleado puede decidir iniciar un proceso de Visto Bueno contra su empleador:

Injurias graves: Cuando el empleador, sus familiares o representantes infligen injurias graves al empleado, su cónyuge o conviviente en unión de hecho, ascendientes o descendientes. Estas injurias pueden ser de naturaleza discriminatoria, lo cual agrava la situación y puede resultar en una indemnización adicional.

Falta de pago o puntualidad en la remuneración: Si el empleador incumple con el pago o la puntualidad en la remuneración pactada en el contrato laboral, el empleado tiene derecho a solicitar el Visto Bueno para poner fin a la relación laboral.

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Exigencia de labores distintas a las convenidas: En caso de que el empleador demande al empleado realizar labores que difieran de las acordadas en el contrato de trabajo, a menos que existan circunstancias de urgencia previstas en la legislación laboral, el empleado puede solicitar el Visto Bueno para proteger sus derechos laborales.

Acoso laboral: Cuando el empleado sufre acoso laboral, ya sea cometido o permitido por el empleador o sus representantes legales, tiene la posibilidad de iniciar un proceso de Visto Bueno para poner fin a la situación y proteger su integridad laboral.

¿CÓMO SE REALIZA?

El proceso para solicitar un Visto Bueno contra un empleador implica varios pasos. En primer lugar, el empleado debe recopilar pruebas sólidas que respalden su solicitud, como documentos relevantes o testimonios de testigos. Luego, es fundamental contar con la representación legal (firma de un abogado) adecuada para guiar el proceso y asegurar el cumplimiento de los procedimientos establecidos.

Una vez que se han reunido las pruebas y se cuenta con la representación legal, el empleado debe presentar la solicitud ante la autoridad laboral correspondiente (Ministerio de Trabajo).

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Una vez presentada la solicitud, se abrirá un proceso de conciliación en el cual se escucharán los argumentos tanto del empleado como del empleador. 

Cuando el Inspector del Trabajo aprueba el visto bueno solicitado por el trabajador, este obtiene el derecho a recibir indemnizaciones similares a las que recibiría en caso de despido injustificado. Esto significa que, en lugar de ser despedido sin previo aviso, el trabajador tiene la posibilidad de terminar su contrato laboral de manera legal y recibir compensación por los daños sufridos.

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