Variedad. En este grupo de estudiantes de la Universidad de Guayaquil, hay nacionales y extranjeros.

Las universidades publicas de la ciudad son regionales

Los alumnos de la ‘Estatal’ y la Espol son, en su mayoría, de Guayaquil y otros cantones de Guayas. Un 20 % llega de otras ciudades de la Costa y Sierra.

La variedad de la oferta académica en carreras de ciencias, tecnología, humanísticas y sociales hacen de la Universidad de Guayaquil y la Escuela Superior Politécnica del Litoral (Espol), los dos centros de estudios públicos predilectos no solo de estudiantes de la ciudad: un 20 % de su población estudiantil llega de otras provincias de la Costa y la Sierra. (Ver gráfico)

Unos han llegado por su propia voluntad al escoger alguna de las carreras que estos centros universitarios imparten. Otros, en cambio, se han visto en la necesidad de migrar a Guayaquil para conseguir un título profesional, ya que en las universidades de sus respectivas ciudades a las que postularon, a través de la Senescyt, no había los cupos para la carrera que deseaban.

Marlene Albán siempre supo que la Universidad de Guayaquil sería el centro donde estudiaría Derecho. “Es una institución con mucha trayectoria. Aquí se han graduado los mejores abogados del país”, dice la guayaquileña de 21 años, quien resalta que la ‘Estatal’ es el único centro público de Guayaquil que oferta esta carrera.

Algo similar sucedió con Ángel Reinoso, quien desde hace dos años estudia Ingeniería Mecánica en la Espol. “Siempre quise estudiar esta carrera y qué mejor en una universidad de prestigio como esta”, añade el joven de 22 años, quien por sus altos puntajes en la prueba Ser Bachiller y en el examen de admisión que receptó la Espol, logró obtener un cupo.

Estadísticas proporcionadas por estas dos instituciones universitarias públicas de la ciudad señalan que el 80 % de sus estudiantes son oriundos de Guayaquil y que el porcentaje restante llega de zonas de la Costa y de la Sierra.

Esto corrobora las cifras del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC) que señalan que a escala nacional, el 27,3 % de los 3,8 millones de hogares tiene algún miembro que se traslada a otra ciudad, en busca de un título profesional o un empleo.

Una de ellas es Evelyn Vásconez, de 20 años, quien es oriunda de Ibarra, provincia de Imbabura, pero hace dos años estudia Medicina en la Universidad de Guayaquil. “En mi provincia no hay un centro público que ofrezca esta carrera, por eso al momento de postular mi primera opción fue la Universidad Central, que está en Quito, pero me derivaron a la Estatal porque aquí todavía había cupo”, indica.

En cambio, Walter Freire tuvo que venir a Guayaquil, hace dos años, para estudiar Ingeniería Civil en la que él considera la mejor universidad del país: la Espol. Es oriundo de Machala, provincia de El Oro y también postuló para la ‘Estatal’, en la misma carrera.

Estos jóvenes migrantes, al llegar a la urbe, se enfrentan a una nueva cultura muy diferente a lo que estaban acostumbrados, y se ven obligados a cambiar su estilo de vida para encajar en su nuevo entorno.

Evelyn y Walter cuentan que les resultó difícil adaptarse, ya que en Guayaquil no tienen familiares. “Los amigos que he hecho en la universidad han sido una gran ayuda para no sentirme tan solo”, añade Walter.

Ellos viajan cada 15 días a su tierra natal y a pesar de extrañar a sus familias, indican que les gustaría quedarse trabajando en el Puerto Principal, cuando terminen sus estudios.

Cubanos y peruanos se cautivan

En el segundo semestre del 2017, la Universidad de Guayaquil recibió 454 estudiantes de diversas nacionalidades. Los cubanos llevan la delantera (11), seguido de los colombianos y venezolanos. Esta última población estudiantil ha aumentado en los últimos cuatro años luego de la crisis económica que afecta a este país sudamericano.

En la Espol, los peruanos y venezolanos son mayoría, quizás por la cercanía de estos países con Ecuador.