Tres historicos en los planes del Idolo
Son tres ‘joyas’ del fútbol mundial. Históricos. Cada uno con su amplia carpeta en el fútbol y, curiosamente, todos han tenido que sentir el fervor del fútbol ecuatoriano en algún momento.
No. No serán un fichaje más para jugar en filas canarias en la temporada 2017. Pero sí para vestir la divisa de Barcelona en la tradicional Noche Amarilla que será en los últimos días del primer mes del año entrante.
Son tres ‘joyas’ del fútbol mundial. Históricos. Cada uno con su amplia carpeta en el fútbol y, curiosamente, todos han tenido que sentir el fervor del fútbol ecuatoriano en algún momento.
David Beckham, Ricardo Izecson dos Santos Leite (Kaká) y Diego Forlán. Todos jugaron mundiales, uno ganó la Bota de Oro y otro el Balón de Oro. Cualquiera que pueda llegar, derrochará pura genialidad en el gramado del estadio Monumental.
El inglés debe tener a Ecuador en su retina. Esa selección que estuvo cerca de eliminarlo del mundial en Alemania 2006 cuando Carlos Tenorio tuvo un mano a mano inmejorable, pero Ashley Cole llegó al cierre y la pelota terminó estrellándose contra el vertical. Minutos después, ‘Becks’ iba a sentenciar a la ‘Tri’ con una genialidad de tiro libre -su especialidad-. Curva hacia dentro, y ese balón ingresa entre el portero (Cristian Mora) y el vertical.
Debutó en el Manchester United, pero luego fue parte de los ‘Galácticos’ del Real Madrid. Posteriormente fue a Los Ángeles Galaxy, después al AC Milán y cerró su carrera en el Paris Saint Germain.
Kaká es sinónimo de grandeza. Ganó el Balón de Oro en 2007, cuando atravesó su mejor temporada con el AC Milán, club con el que conquistó la Liga de Campeones ese mismo año y otros cinco títulos más.
Pero el que más llevará en su mente Kaká es el mundial en Corea-Japón 2002, cuando con solo 20 años. No tuvo mayor protagonismo, jugó 16 minutos, pero a quién engañamos. ¡Es una Copa del Mundo!
Por último, ‘Cachabacha’. Se llevó la Bota de Oro en el mundial 2010 en Sudáfrica, donde fue el mejor jugador de Uruguay, a la que la llevó hasta semifinales de esa copa.
Vistió divisas de peso como el Inter de Milán, Peñarol el Manchester United y Atlético de Madrid, pero su mejor rendimiento llegó de amarillo, con el Villarreal.
Quien fuera que pise el suelo guayaquileño para esa noche, hará de ese encuentro algo inolvidable. El hincha siempre recordará a Ronaldinho, pero estos tienen la magia del fútbol de élite. ¿Quién llegará?