La ruta. El tren atraviesa por paisajes atractivos al filo de la montaña.

El tren, en plan de ser patrimonio mundial

Es conocido por muchos como el tren con la ruta férrea más difícil del mundo. Está en Ecuador. Tiene sus orígenes a finales del siglo XIX y principios del XX.

Es conocido por muchos como el tren con la ruta férrea más difícil del mundo. Está en Ecuador. Tiene sus orígenes a finales del siglo XIX y principios del XX. Y hoy se encamina, de manera lenta pero segura, a ser reconocido como un patrimonio mundial.

Según informó el Ministerio de Cultura y Patrimonio, se ha conformado un Comité Gestor integrado por gobiernos municipales e instituciones públicas, con el fin de formular el expediente internacional, que justifique el valor patrimonial, integridad y autenticidad del tren trasandino ecuatoriano.

Este comité está conformado por los municipios de: Riobamba y Alausí, además de los ministerios de Cultura y Patrimonio y Turismo, la Empresa de Ferrocarriles del Ecuador y el Instituto Nacional de Patrimonio Cultural (INPC).

Según las autoridades, la iniciativa ya se encuentra inscrita en la Lista Indicativa para Patrimonio Mundial, que constituye un inventario de bienes propuestos por cada Estado, susceptibles de ser considerados Patrimonio Mundial por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco).

Este tren debe su calificativo del “ferrocarril más difícil del mundo” por las complicaciones que en su diseño derivaron en una ruta muy compleja y de alta peligrosidad, pero a la vez muy segura por la forma en que los contratistas norteamericanos Archer Harman (de Virginia) y Edward Morely la construyeron.

Su parte más complicada está en un enorme obstáculo: una pared de roca casi vertical llamada ‘La Nariz del Diablo’. Ahí, un zig-zag cavado en la roca permite al tren, avanzando y retrocediendo sucesivamente, alcanzar la altura necesaria hasta Alausí. (F) VTL