Activismo. La actriz estadounidense Mia Farrow se unió, en 2014, a una campaña para denunciar a Chevron.

Traspie judicial por el caso Chevron en EE. UU.

Se desmarcan del revés judicial. El Tribunal Supremo de Estados Unidos rechazó, ayer, un recurso para exigir que la petrolera Chevron pague una indemnización de $ 8.650 millones por daños ambientales en la Amazonía.

Se desmarcan del revés judicial. El Tribunal Supremo de Estados Unidos rechazó, ayer, un recurso para exigir que la petrolera Chevron pague una indemnización de $ 8.650 millones por daños ambientales en la Amazonía.

La decisión fue tomada con calma por la Unión de Afectados por Texaco (Udapt) porque asegura que no afecta los procesos legales planteados en otros países para hacer efectivo el cobro.

Pablo Fajardo, vocero de esta organización, dijo ayer a EXPRESO que el recurso rechazado corresponde a una acción planteada, a título personal, por el abogado estadounidense Steven Donziger, quien no representa a los afectados ecuatorianos hace varios años.

Este no es el primer traspié que sufren los demandantes. En 2014, el juez federal de Nueva York, Lewis Kaplan, rechazó una acción para hacer efectivo el cobro de la multa fijada por un juez ecuatoriano.

¿El motivo? Kaplan, en su argumentación, explicó que hubo una “conspiración” entre el juez que aceptó los sobornos y Donziger. Concluyó entonces que la decisión judicial en Ecuador se obtuvo “por medios corruptos”.

Fajardo recordó que, el año pasado, el Tribunal de Apelaciones del Segundo Circuito ratificó lo actuado por Kaplan. Esta instancia consideró que en Ecuador hubo “un desfile de acciones corruptas” para conseguir la millonaria sentencia contra Chevron.

“Tras este fallo resolvimos no recurrir al Tribunal Supremo. Se estaba protegiendo a la corporación. Esa sentencia de 2016 prohíbe que los demandantes ecuatorianos ejecuten el cobro en Estados Unidos, pero abrió una ventana: podíamos demandar en el país que creamos conveniente”, explicó Fajardo.

Los integrantes de la Udapt tienen acciones legales contra Chevron en Canadá, Argentina y Brasil, donde la compañía tiene activos. Los procesos todavía están en trámite.

Ayer, en un comunicado, la petrolera insistió en que nunca operó en Ecuador y que la acusación surgió porque, en 2001, Texaco se convirtió en una de sus filiales más pequeñas, en Ecuador.

Mientras esto se resuelve, los afectados mantienen la expectativa de una reparación justa. Humberto Piaguaje, de la nacionalidad Secoya, dijo ayer a este Diario que continuarán en su lucha porque los efectos siguen apareciendo.

Procuraduría se pronuncia

Aunque aclara que el Estado no es parte de esta demanda, la Procuraduría dijo ayer que la decisión de la Corte Suprema no invalida la sentencia ecuatoriana contra Chevron.

La negativa no significa una confirmación de las decisiones de cortes inferiores sino que la Corte concluye que el caso no amerita el uso de sus limitados recursos, señala.